Tenía una pistola real y diez balas cargadas. El atracador que irrumpió ayer en la sucursal de La Caixa de la calle Diamantino García Acosta de Camas consiguió llevarse 11.500 euros tras encañonar al personal de la caja de ahorros. Después, huyó a la carrera y se refugió en un bloque de okupas de la calle La Cartuja. Allí fue reducido y detenido por seis agentes de la Policía Local de Camas y dos de la Policía Nacional.

Los hechos ocurrieron sobre las ocho y media de la mañana. El atracador, un delincuente de 34 años y vecino de Tomares, entró en la sucursal y amenazó a los empleados con la pistola. Así se llevó 11.500 euros. Una patrulla de la Policía Local que circulaba por las inmediaciones fue alertada de lo ocurrido y localizó al atracador en un bloque de okupas. Allí, en el patio de luces del edificio, se presentaron ocho agentes -seis locales de Camas y dos nacionales- con las armas desenfundadas.

Al no tener otra alternativa, el atracador se entregó, si bien luego amenazó a los agentes diciéndoles que tenía que haber abierto fuego. El delincuente fue detenido y permanece en las dependencias de la Policía Nacional a la espera de pasar a disposición judicial en las próximas horas.