Cuatro veranos después la historia se repite, aunque en distinto escenario. La presidenta de la Junta, Susana Díaz, oficializó este martes su candidatura al 13º Congreso del PSOE andaluz, que se celebrará los días 29 y 30 de julio en Sevilla. Enrocada en su feudo tras su derrota en las primarias, su objetivo es revalidar su cargo de secretaria general para "renovar un proyecto de éxito" que, a su juicio, recibió el apoyo de los andaluces en las elecciones autonómicas de marzo de 2015 y dos meses fue refrendado en las municipales.

Poco antes del mediodía, la jefa del Ejecutivo llegó a la sede regional de la sevillana calle San Vicente a formalizar su candidatura. A partir de este miércoles, tiene diez días para reunir 4.850 avales entre la militancia andaluza, una cifra que se corresponde con el 10% del censo. No debe tener problemas para lograrlo. En el proceso federal de hace un par de meses, la candidatura susanista alcanzó los 26.551 avales en su federación.

Su contrincante, Pedro Sánchez superó los 8.000, pero no habrá una candidatura apoyada por el flamante secretario general del PSOE para disputar a Díaz el liderazgo en su feudo. La inmediatez de los plazos y la retirada del granadino José Antonio Pérez Tapias -dirigente de la corriente Izquierda Socialista y reconocido pedrista- desactivaron esa posibilidad definitivamente. La propia presidenta de la Junta se mostró este martes confiada en recibir un "respeto" que ella considera "recíproco". El pacto de no agresión entre ambos previo al 39º Congreso Federal y la actitud de Díaz durante el cónclave del pasado fin de semana sugieren que no habrá batalla en Andalucía, pero el portavoz de la nueva Ejecutiva, Óscar Puente, reconoció el lunes que no "cercenarán" los intentos de ningún militante para desbancar a los actuales secretarios generales, muchos de los cuales estuvieron con Díaz en el proceso de primarias.

Hace cuatro veranos la situación era muy distinta. Susana Díaz era consejera de la Presidencia y de Igualdad del segundo Gobierno de José Antonio Griñán. Con los termómetros algo menos candentes, el entonces jefe del Ejecutivo anunció que no se presentaría a la reelección y su delfina saltó a la palestra. Díaz se presentó a las primarias, logró 21.000 avales y laminó al también consejero Luis Planas y al hoy miembro de la Ejecutiva pedrista José Antonio Rodríguez, alcalde de Jun. Antes del final del verano era presidenta de la Junta. Ninguno de los dos aspirantes alcanzó el mínimo de firmas para presentar batalla en las urnas, pero un candidato outsider podría tener éxito si consigue aunar a su alrededor a los militantes descontentos con la actual dirección y al 31% que apoyó a Pedro Sánchez en las primarias federales en la región.

Es lo que pretende conseguir el militante jiennense Francisco Tirado, miembro de una de las plataformas de apoyo al secretario general socialista que surgieron durante las primarias federales. Tirado envió la documentación necesaria por correo electrónico a San Vicente en la noche del lunes y acudió en la mañana de este martes para oficializar su candidatura, que se presentó oficialmente por la tarde en la Casa del Pueblo de la localidad jiennese de Rus, de donde el aspirante es natural, pese a que milita en Linares. Si Tirado reúne los 4.580 avales antes del 1 de julio, la campaña comenzará el día 6 y se extenderá hasta el 15, dejando la hipotética votación para el 16 de julio.