Con presupuestos aprobados y una economía creciendo a un ritmo del 3% anual, no es momento de pensar en un adelanto electoral. Éste es el mensaje que trasladó la presidenta de la Junta y secretaria general del PSOE-A, Susana Díaz, durante su intervención en el Comité Director, el máximo órgano del partido entre congresos, reunido ayer por primera vez desde el cónclave del pasado verano. "Nos queda un año y pico hasta que los ciudadanos nos juzguen en las urnas. Lo digo sin ánimo de darle un disgusto a nadie. Quienes tienen muchas prisas por las elecciones, van a tener que trabajar", ironizó la líder de los socialistas andaluces, en alusión a los rumores sobre una posible convocatoria de elecciones anticipadas en 2018.

Los socialistas acusan al líder del PP-A, Juanma Moreno, de alimentar un debate que a su juicio no tiene ningún fundamento. Para el PSOE-A, la estabilidad institucional es el principal valor del Gobierno andaluz y constituye un ejemplo en un momento convulso para el panorama político nacional. "Cuando se tiene estabilidad, se valora mucho lo que se puede hacer. Que se lo digan Rajoy, que no tiene ni presupuestos ni sabe el horizonte al que se enfrenta", sostuvo la presidenta de la Junta, que aseguró que ve a "la derecha desnortada". "Y a otros parece que la estabilidad no les mola y les gustaría ver iniciativas más divertidas", señaló Díaz, sin especificar a quién se refería.

Rajoy no tiene estabilidad ni sabe el horizonte al que se enfrenta. La derecha está desnortada"

La líder socialista hizo un llamamiento a los suyos para que aprieten los dientes y "trabajen por Andalucía". La coyuntura económica facilita agotar la legislatura y llegar en buenas condiciones a los comicios, que deberán celebrarse en marzo de 2019. "Éste va a ser un buen año para Andalucía", sostuvo la secretaria general del PSOE-A. A continuación citó una serie de datos económicos que sustentan esa valoración. Entre ellos, destacó que el producto interior bruto (PIB) alcanzó en 2017 "el mayor valor nominal de la historia" tras crecer un 3%, el récord histórico de exportaciones con unas ventas por encima de 30.000 millones de euros, o la caída del paro que arrojó la última Encuesta de Población Activa. "Ampliar derechos, recuperar otros y crecimiento económico. Esto es lo que aporta este gobierno a Andalucía", incidió la presidenta de la Junta.

El principal reto que se marca para el final de la legislatura es cerrar un acuerdo "justo" sobre la financiación autonómica. "Espero que haya lealtad del Gobierno de España y cumpla su palabra. Ya está bien de excusas peregrinas", resaltó Díaz, que recordó que de este acuerdo pivotan la dependencia, la educación o la sanidad. "Nuestra joya de la corona, por más que a alguien le moleste que lo diga", agregó.

La secretaria general de los socialistas andaluces insistió en que el PSOE-A estará "vigilante para que no haya agravios ni privilegios" y subrayó que su partido defiende la unidad de España, la legalidad y la Constitución. "Soy de la generación heredera de todo lo bueno del PSOE-A y de los errores que haya permitido cometer. Pero esa herencia es la fortaleza del legado de un partido que siempre ha defendido por encima de todo los intereses de Andalucía y del conjunto de los españoles con la bandera de la igualdad", subrayó.