Se puede viajar en tren de China a Madrid y recorrer 9.977 kilómetros del tirón atravesando China, Kazajastán, Rusia, Bielorrusia, Polonia, Alemania y Francia. Pero desde Granada no se puede viajar en tren hasta Madrid desde hace casi 900 días. La delegación granadina de la Mesa por el Ferrocarril reclamó ayer en Bruselas el fin del aislamiento ferroviario.

La reunión, organizada por la europarlamentaria granadina Clara Aguilera (PSOE), tuvo las destacadas ausencias de los representantes del PP, Ciudadanos y Podemos en el Parlamento Europeo, aunque la parlamentaria de IU Paloma López sí participó en la primera jornada de reuniones que hoy culminará con una "petición concreta de acción" para que los trenes vuelvan a conectar a Granada con el mundo. Uno de los ausentes fue Esteban González Pons, del PPE, que excusó su presencia aduciendo "problemas de agenda".

Sobre la mesa estuvo también la denuncia que formuló el pasado mes de marzo el Grupo Parlamentario de Socialistas y Demócratas Europeos, señalando que el Gobierno había sacado de la planificación hasta 2030 la ejecución del tramo del Corredor Mediterráneo entre Almería y Granada.

La visita institucional arrancó con un encuentro de la delegación granadina con la presidenta de la Comisión de Peticiones, Cecilia Wikström, y otra miembro de la misma, Virpi Koyka. Posteriormente, mantuvieron una reunión con los eurodiputados socialistas españoles y de IU. El alcalde, Francisco Cuenca, junto con la delegada del Gobierno andaluz en Granada, Sandra García, y el presidente de la Diputación Provincial, José Entrena, encabezan la representación granadina integrada también por representantes de los sindicatos, del tejido empresarial y por José Fernández, portavoz de la Marea Amarilla, que en los últimos meses ha sido especialmente crítico con el Ayuntamiento y llegó a tildar de "especulativa" su propuesta de soterramiento. Pero se sumó para reivindicar en el corazón de Europa una AVE de primera para la ciudad.