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Andalucía

Maeztu confirma que no hay menores extranjeros en la cárcel de Archidona

  • El Defensor del Pueblo Andaluz revela que uno de los internos tenía menos de 18 años, por lo que la Junta se quedó con su tutela

  • Las ONG afirman que ya están siendo devueltos

Una manifestación para protestar por el internamiento de extranjeros en la futura cárcel de Archidona.

Una manifestación para protestar por el internamiento de extranjeros en la futura cárcel de Archidona. / carlos Díaz / efe

El Defensor del Pueblo Andaluz aclaró ayer todas las dudas. "Ya no hay menores inmigrantes" internados en el complejo de la futura cárcel de Archidona, que viene utilizándose como Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) desde que una llegada masiva de extranjeros a las costas de Murcia desbordara la capacidad de acogida de dicha comunidad.

Maeztu reveló que la Junta de Andalucía le había comunicado inicialmente que eran dos los menores argelinos que llegaron a España con unos quinientos compatriotas suyos. Después de la comprobación médica, se descubrió que sólo uno de los dos tenía menos de 18 años, por lo que su tutela pasó al servicio de protección de menores de la Administración andaluza. "Hubo un periodo de confusión en el que se dijo que había tres y luego dos", reconoció el Defensor del Pueblo Andaluz, que también ostenta la figura de Defensor del Menor.

La entidad que dirige Maeztu organizó ayer unas jornadas sobre inmigración en las que participó también su homólogo nacional, Francisco Fernández Marugán, que ve posible que ya hayan inmigrantes devueltos a su país de origen después de que la ONG Málaga Acoge denunciara ayer esta situación. El portavoz de la plataforma ciudadana surgida para protestar contra la creación de este CIE improvisado, Daniel Machuca, reveló ayer que las expulsiones comenzaron el lunes, con el traslado de un primer autobús con cuarenta internos a Almería, de donde partieron hacia Argelia.

"No me extrañaría que en este momento hubiera devoluciones en curso o que se hubieran hecho devoluciones", dijo el Defensor del Pueblo, porque "la voluntad del Gobierno era esa", ya que "manifestó desde el primer momento que quería devolverlos a su país de origen". "Quien tiene que informar de si va a hacer o no esas devoluciones o las ha hecho es el Gobierno", porque "no tenemos información directa de esta situación".

No obstante, Fernández Marugán precisó que "Argelia es un sitio de difícil devolución" porque "no las hacen con los vuelos de la Agencia Europea de Guardia de Fronteras y Costas (Frontex) sino que las hace directamente en un número reducido de personas por el barco que va de Alicante a Orán". Además, recordó que "el número de personas que admite Argelia por ese procedimiento es relativamente reducido", pero "se han hecho devoluciones históricamente", y "el único problema es que las quiera admitir" Argelia.

"Habrá que esperar nuevos acontecimientos", dijo el Defensor del Pueblo Estatal, que calificó como "sencilla" la posible mejora de las condiciones de los inmigrantes acogidos en Archidona. "Aquello era un edificio que llevaba tres años sin ocupar y que no estaba ni estrenado, así que llegaron primero las personas y luego las cosas", apostilló.

Sin embargo, un grupo de inmigrantes protagonizó ayer un motín en el interior del centro penitenciario, que obligó a la intervención de efectivos de los antidisturbios de la Policía y a la suspensión de los servicios de atención que prestan a diario las ONG. Según confirmaron fuentes policiales, no es la primera vez que se producen altercados en el recinto y el de ayer se resolvió "como en otras ocasiones y sin utilizar la fuerza". Las mismas fuentes descartaron la existencia de heridos.

Sobre las 14:00 se produjo un altercado en el modulo 1 de la prisión con la rotura de mobiliario y equipamiento. El personal responsable del centro decidió desalojar a los abogados del turno de oficio del Colegio de Antequera que asisten a los inmigrantes y a los 21 miembros de la Cruz Roja, entre monitores, mediadores y asistentes sociales que estaban en el interior. Al desalojo de estos colectivos siguió la entrada de más refuerzos de las unidades de intervención de la Policía, según confirmó el presidente de Cruz Roja, Samuel Linares. La situación quedó "controlada" una hora después.

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