En el PP están preocupados por el impacto que los impagos de la Consejería de Educación, 24 millones en la educación pública y otras 25 en la concertada, puedan tener en el arranque del curso escolar, ya que hacen peligrar servicios como los comedores escolares, aulas matinales, actividades extraescolares o el acompañamiento de monitores. Esta situación fue denunciada ayer por la vicesecretaria de Política Educativa del PP-A, Marifrán Carazo, que acusó al Gobierno de PSOE e IU de "lanzar cortinas de humo para ocultar sus recortes e impagos" y "culpar al Gobierno de Rajoy, de unas reformas, que son necesarias y temporales, tras la herencia recibida por el anterior Gobierno socialista de Rodríguez Zapatero".

Según explicó, la abultada deuda de 49 millones de la Junta está llevando al límite a todas esas pymes proveedoras de servicios, "que llevan sin cobrar incluso actividades correspondientes a un curso escolar completo", y ello cuando "los padres sí que han pagado religiosamente estas prestaciones", lo que le llevó acuestionarse por "¿dónde está este dinero? y ¿por qué no paga la Junta?".

A las críticas a su gestión, la dirigente popular añadió una más a este cogobierno de PSOE-IU, al reprocharles que hayan "tirado por el camino fácil, recortando el sueldo de los docentes, que verán reducido su salario un 21%", de tal forma que "tienen el sistema educativo incendiado, cargado de incertidumbre para el próximo curso, y sin delegados provinciales".