Los ex presidentes Manuel Chaves y José Antonio Griñán, diputado y senador ahora y ambos señalados por la juez Alaya, manifestaron su conformidad con lo que han hecho ambas cámaras legislativas. No obstante, Manuel Chaves opinó que quizás hubiera sido mejor plantear una queja al Consejo General del Poder Judicial, ya que la juez ha repetido en su petición al Congreso. Chaves se preguntó si el hecho de que Mercedes Alaya haya enviado, de nuevo, la notificación es "una ocurrencia, un desprecio al Congreso o una provocación para llamar la atención". "Muchos nos estamos haciendo esa pregunta -siguió-. ¿Cómo se puede calificar la actuación de una juez que ya fue advertida de un error que ahora vuelve a cometer?". El ex presidente calificó de "confusa y rara" la actuación de la juez de instrucción sevillana, quien, según añadió, "ha saltado por encima del Código Penal". El diputado socialista también subrayó que es "sorprendente" que, además, la juez vuelva a acudir al Congreso "cuatro o cinco meses después" de que ya lo hiciera y se le dijera que éste no era el cauce legal, ya que en el mes de diciembre se dirigió a las cámaras para pedir la credencial de los dos diputados y también del ex presidente andaluz y senador, José Antonio Griñán.

Por su parte, Griñán afirmó que coincide "plenamente" con la decisión del Senado de devolver a la juez Mercedes Alaya, que instruye el caso de los ERE fraudulentos, la documentación dirigida a la Cámara, al entender que no ha sido correcto el procedimiento. "Las leyes están para cumplirlas", añadió Griñán para referirse a su situación de aforado, que establece que el Tribunal Supremo es el órgano jurisdiccional con el que se relaciona el Senado cuando se trata de un asunto que afecta a un aforado. El senador dijo que "ha hablado el presidente del Senado y un humilde senador no tiene nada que decir". Pío García-Escudero afirmó antes que la vía de tramitación correcta es el Senado.