Un centenar de miembros del sindicato de Policía Nacional, (SUP) del de la Guardia Civil ( UCG) y de los bomberos han dado esta tarde su particular bienvenida a los participantes del XIII Congreso Regional del PP. Entre gritos, pitadas, insultos y varios intentos de cortar el tráfico, los funcionarios han mostrado su malestar por los duros recortes que anunció este jueves el Gobierno de la Nación. Mientras, sus compañeros de la Policía Nacional acordonaron a primera hora la zona del Palacio de Congresos para que nadie ajeno al congreso pudiera entrar. Ha sorprendido la cantidad de agentes de seguridad (más que manifestantes) que se congregaron en la zona. Cecilio Medina, representante de UCG que se 'caracterizó' para la ocasión con una soga al cuello explica que los recortes no solo afectan a los funcionarios, también a sus familias, amigos y vecinos. “Es muy injusto porque hay otras partidas donde se puede recortar”, explica, para acto seguido proponer una idea: “Se podría desmilitarizar la Guardia Civil y unificarnos con la Policía Nacional”. Los manifestantes aseguran que esta no será la última manifestación y anunciaron que van a protestar "allá donde haya un alto cargo". Y anuncian más medidas: “A partir de ahora en vez de denunciar nos vamos a dedicar a informar a la ciudadanía”

Desde el SUP César Calín, apuntó que aunque el gremio de funcionarios sabía que había que hacer esfuerzos, “nos parece excesivo que desde que empezaron los recortes hayamos perdido un 30% de poder adquisitivo” y lamenta que la Policía se esté jugando todos los días la vida por 1.300 euros. La protesta se ha mantenido hasta poco antes de las seis de la tarde y anuncian que mañana y pasado volverán a concentrarse a las puertas del congreso regional del PP, desde donde no hubo ningún tipo de referencia a las protestas.