El presidente de la FAMP y de la Diputación de Sevilla, Fernando Rodríguez Villalobos, participó ayer en la clausura de unas jornadas dedicadas al análisis de los problemas actuales de las corporaciones locales  organizadas por el Ayuntamiento de Montefrío y la cátedra Rafael Escudero. Éstas han servido para reivindicar una mayor financiación local y resaltar la gestión de las Corporaciones Locales.

Según Villalobos, "ya lo hemos demostrado en los peores años de la crisis, quizá, por los que ha atravesado la política local en democracia, que han sido sin duda, los del último lustro que somos unos buenos gestores públicos ya que los ayuntamientos hemos cumplido con el déficit y hoy somos la única Administración con superávit". 

El presidente de la FAMP denunció que los planes de ajuste y reforma local "han sido el garrote vil con el que nos han torturado, sin que de nuestra boca haya salido en ningún momento el abandono de nuestras responsabilidades políticas y de la búsqueda de una gestión de excedencia. Una responsabilidad que pasa por dar el mejor servicio, el de mayor calidad, a los vecinos de nuestros pueblos y honestamente creo que lo hemos conseguido con esfuerzo, con racionalidad y con mucha sensibilidad social", añadió.

Rodríguez Villalobos aseguró que los ayuntamientos y las diputaciones andaluzas han hecho "piña todos estos años para sacar adelante la situación. Y lo hemos hecho con éxito, garantizando el servicio y, a la vez, cumpliendo con exigencias como los objetivos de déficit, donde venimos cerrando con superávit tres años consecutivos".

El presidente de la FAMP y de la Diputación de Sevilla afirmó que el municipalismo ha demostrado con creces, en los peores momentos de la crisis, "que está capacitado para solventar sus tareas con solvencia y eficacia, con rigor y sensibilidad". 

Villalobos se refirió a las reformas pendientes y necesarias en el ámbito de gobierno local. Apostó por "la necesidad de legitimar aun más los plenarios locales y, especialmente, los provinciales. A estos últimos, los dotaríamos de mayor legitimidad revisando el sistema de elección y, por supuesto, excluyendo a las capitales de provincia de unos plenos que deben representar a los municipios que de verdad necesitan a las diputaciones: los de menos de 20.000 habitantes".

Otro de los aspectos señalados por el presidente de la FAMP es la apertura de un debate entre el Estado, las Comunidades Autónomas y los Entes Locales sobre la financiación local. "Un tema que los municipalistas españoles reclamamos desde 1978 porque seguimos siendo la Cenicienta de las Administraciones Públicas, a pesar de que somos la primera en auxiliar y dar soluciones a los ciudadanos", sentenció Villalobos.

El presidente de la FAMP también se refirió al control externo de los fondos públicos en los ayuntamientos "porque eso implica y proporciona transparencia en la gestión de las instituciones más próximas al ciudadano. La transparencia es una garantía del buen gobierno que recuperará la confianza de los vecinos en la gestión del día a día de las corporaciones locales y de la Política".

Villalobos apostó por el fomento del empleo y exigió "que se acoten y se nos dote de competencias claras porque somos los que mejor conocemos el terreno. Y porque además venimos demostrando, con planes de empleo y propuestas concretas, que estamos muy capacitados para generar empleo en nuestro territorio".

"El debate está planteado desde el municipalismo y ahora sería necesario plantearse una mesa a tres bandas: Estado, Autonomías y Entidades Locales para que el municipalismo tenga, de una vez por todas, su papel destacado y vertebrador en la arquitectura de un Estado moderno y eficaz en el que todos nos sintamos cómodos. Un Estado que cuente, por supuesto, con unas diputaciones renovadas, capacitadas y competentes en lo que mejor saben hacer: dar servicio a los Ayuntamientos", concluyó Rodríguez Villalobos.