La terminación y puesta en funcionamiento del tranvía de Alcalá de Guadaíra se está convirtiendo en un imposible. Esta infraestructura, paralizada hace ya dos años cuando sólo queda un último tramo por concluir, necesitaría más de 93 millones de euros para permitir que sus trenes circulen por el área metropolitana, sin contar con cerca de 40 millones que se estima que costarían las cocheras. Esta última inversión permitiría soluciones negociadas, pero la principal no. Ésta es la conclusión que se extrae del borrador de trabajo que maneja la Consejería de Fomento de la Junta de Andalucía, promotora de la obra.

Dicho documento, según adelantó el digital Sevilla Actualidad, cifra en 93,12 millones de euros el montante necesario para poner en funcionamiento el tranvía alcalareño. En concreto, 24,5 millones corresponderían a la obra del último tramo, el tercero, pero luego harían falta otros 51 para dotar de energía, señalizaciones e instalaciones el trazado ferroviario y, finalmente, 17,5 para adquirir los siete trenes previstos.

La falta de inversión pública obligó a paralizar en 2012 esta obra, ejecutada al 80%. Por ello, hace unos meses, el Gobierno andaluz había barajado una salida para concluir esta infraestructura que pasaría, tal y como publicó este periódico. Una posible solución sería que la principal empresa accionistas de la sociedad que explota el Metro de Sevilla, Globalvía, asumiera la construcción del último tramo que conectaría con la Universidad Pablo de Olavide y, por tanto, con el suburbano, lo que permitiría potenciar también este transporte e inyectarle nuevos pasajeros. La operación -que se ha negociado por un largo tiempo- consistiría en costear la obra, que realizaría FFC -una de las empresas matriz de Globalvía- a cuenta de quedarse luego con la explotación de la línea.

El documento de trabajo ha sido elaborado por un técnico de la Agencia de Obra Pública, según explicaron este lunes fuentes de Fomento. Y, según ha trascendido, ve "imposible" incorporar a Metro de Sevilla a las obras del tranvía. El motivo es que dicha sociedad tiene como objeto social la explotación de la línea 1 del Metro de Sevilla y, por tanto, con los actuales estatutos y su contrato actual no sería posible. Es más, el borrador llega a apuntar que dicha entidad no tiene capacidad financiera para acometer dicho proyecto y que, en cualquier caso, esta operación no podría realizarse dentro de su contrato actual porque superaría el 50% sobre la adjudicación.

Todas estas cuestiones hacen que la puesta en marcha del tranvía de Alcalá se aleje cada día más, pues las previsiones de la Junta de Andalucía no son buenas a corto plazo. Después de que las cuentas del Gobierno andaluz para 2015 dejasen fuera este proyecto, es la presión ejercida por los representantes municipales la que ha obligado a la Junta de Andalucía a reconsiderar la inclusión de alguna partida para mantener viva la obra. Sin embargo, se trata, según lo anunciado por el alcalde, el socialista Antonio Gutiérrez Limones, de sólo cuatro millones de euros, una cuantía más que insuficiente para retomar la obra paralizada.

El documento de la Consejería de Fomento -que no quiso este lunes pronunciarse al respecto- también se fija en otros problemas añadidos que tiene el tranvía de Alcalá. Así, apunta que un problema clave es el déficit de explotación. El estudio cifra en siete millones de euros el coste de explotación y señala que el déficit anual del servicio sería de más de 3,5 millones de euros.

No obstante, el borrador apunta que las cifras que se han barajado sobre el uso de este transporte son muy optimistas. Según Fomento, con una demanda de un millón de viajeros anuales, que es "superior al uso del transporte público actual", el déficit se situaría en una cifra "más realista": seis millones de euros anuales. Según el convenio firmado, la Junta de Andalucía asumiría el 75% del coste y el Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra, el 25%.

Los recortes que obligaron a parar las obras también afectaron a los tranvías de Dos Hermanas y del Aljarafe, cuyas obras están mucho más atrasadas. La colaboración público-privada se pensó en un primer momento como solución, pero la crisis abortó también esta idea. Y hoy, los tres proyectos están condenados al abandono.

Los empresarios reclaman a los políticos que cumplan su palabra

La Federación de Industriales y Comerciantes de Alcalá (FICA) mostró este lunes su decepción por el abandono que, a su entender, está sufriendo el municipio por parte de la Junta de Andalucía en materia de infraestructuras. La partida para el tranvía que se quiere incorporar por la vía de la tramitación parlamentaria a los presupuestos para 2015 es "ridícula" y "oportunista" para este colectivo, que considera que cuatro millones no servirán para dar ningún impulso efectivo a la obra. "El Gobierno andaluz y, en concreto, la Consejería de Fomento, con su postura cicatera, se salta a la torera los acuerdos parlamentarios adoptados por unanimidad y los compromisos contraídos en su día por el delegado del Gobierno de la Junta en Sevilla que, el 28 de julio, manifestó que era vital acabar con este último tramo del tranvía y, por tanto, prioritario en las cuentas de 2015", apuntaron fuentes de la federación. Además, añadieron que la delegada territorial de Fomento, Granada Santos, volvió a comprometerse con ellos el pasado 18 de agosto. La FICA anunció que realizará más acciones y animará a la sociedad civil alcalareña a que se sumen para reivindicar esta infraestructura.