La asociación Escuelas Católicas de Andalucía (ECA) ha mostrado el "malestar" y "preocupación" de esta patronal de centros educativos respecto a la política de recorte de conciertos que promueve la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía, y han asegurado que la enseñanza concertada permite a la administración autonómica ahorrar cada año unos 942 millones de euros. El secretario general de ECA, Carlos Ruiz, ha señalado que el colectivo llevará el caso ante la Oficina del Defensor del Pueblo Andaluz, que dirige José Chamizo, mientras que también contactará con otros agentes implicados como padres de alumnos, otras patronales o sindicatos de la enseñanza concertada (FSIE y USO) para tratar de formar un frente común.

Ruiz ha manifestado la situación de "indefensión" en la que se encuentra ECA frente a la administración educativa al tomar ésta unas medidas, de manera "unilateral", que "atentan gravemente contra la enseñanza concertada con la intención de provocar un efecto disuasorio", entendiendo este modelo como "subsidiario de la enseñanza pública". "Desde Escuelas Católicas de Andalucía no pretendemos una confrontación entre pública y concertada y no vamos a entrar en esa provocación que a algunos interesa; nosotros valoramos el buen hacer de la enseñanza pública y no competimos con ella, no somos rivales, somos una alternativa", ha asegurado el secretario general de ECA, que ha reivindicado su creencia en que "las familias que solicitan nuestros centros para sus hijos lo hacen en base a nuestro proyecto educativo, nuestro ideario y también por una calidad de enseñanza más que contrastada".

Respecto a las razones esgrimidas por la Consejería de Educación para la retirada de convenios, relativas a la bajada de natalidad y la crisis económica, Ruiz opone que "es mucha casualidad que el descenso haya sido repentino en este año y no paulatino", aludiendo a que el PSOE "está siendo rehén de su socio de gobierno". "Todos los centros afectados tienen demanda suficiente y en la mayoría es muy superior la demanda a la oferta; además, se da la circunstancia que en dichas poblaciones no se cierran unidades de los centros públicos", ha asegurado el secretario general de Escuelas Católicas de Andalucía, que se ha apoyado en las cifras de coste escolar indicando que un alumno en la enseñanza pública cuesta anualmente al Estado 6.187 euros, mientras que uno de la enseñanza concertada cuesta 3.026 euros. 

Con esos datos, en Andalucía la concertada, que reúne a 298.235 alumnos, en este curso estaría ahorrando 942.720.835 euros. Las unidades afectadas en próximos años por los recortes, a día de hoy, son 114, con cerca de 3.000 familias afectadas y más de 155 profesores, a lo que hay que sumarle el efecto económico "demoledor" para las titularidades que, entre otras cosas, tendrían que hacer frente a indemnizaciones. Ruiz ha asegurado la predisposición del colectivo al "diálogo", añadiendo que se va a publicar en los tablones de anuncios de los centros afectados la totalidad de plazas escolares correspondientes a las unidades solicitadas, "pues no hay denegación expresa de los conciertos de dichas unidades", y sin descartar la adopción de las correspondientes medidas legales contra la administración educativa.