El consejero de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo, José Sánchez Maldonado, reconoció hace apenas un mes su "bochorno" al referirse a la gestión de la extinta Fundación Andaluza de Formación para el Empleo (Faffe), dependiente del Servicio Andaluz de Empleo (SAE). El demoledor informe de la Cámara de Cuentas de Andalucía publicado a finales de enero, que recogía las conclusiones tras fiscalizar las ayudas a este ente y otros beneficiarios de la formación para los ejercicios 2009 y 2010, evidenciaba la falta de control y rigor en la adjudicación de las partidas a un organismo de tamaño descomunal (unos 1.300 empleados públicos).

Ha sido ahora, en el contexto de la investigación policial a los cursos de formación otorgados por la Junta -centrados por el momento en la provincia de Málaga-, cuando la comisión parlamentaria de Hacienda y Administración Pública, celebrada ayer, ha dado luz verde a sendas iniciativas de IU y el PSOE para que el Parlamento insta a la Cámara de Cuentas a que realice una fiscalización "de carácter integral" sobre las subvenciones concedidas a la Faffe entre 2003 y 2011.

IU presentó su iniciativa el pasado 13 de marzo, tras lo que el PSOE registró otra muy similar el 7 de abril, y ambas reclaman que la Cámara de Cuentas fiscalice la totalidad de las subvenciones hasta 2011, último año de funcionamiento de esta fundación, que en su última etapa dirigió Fernando Villén. El PP respaldó las iniciativas de ambos partidos pese a considerar que lo que pretenden los socios del Gobierno es "poner un tapón para no ver el fondo de la botella", y subrayó que va a seguir exigiendo la creación de una comisión de investigación, como la impulsada en el verano 2012 para analizar los ERE fraudulentos.

Los portavoces de la comisión defendieron sus posturas bajo el esquema esperado: el del PSOE, Jesús Ruiz García, dijo que esta iniciativa redundaría en la "credibilidad y transparencia" de los fondos públicos y le pidió al PP que "salga de su tónica habitual" y apoye el informe resultante.

Lejos de aludir a las conclusiones arrojadas por este organismo fiscalizador tras estudiar las ayudas del SAE de los años 2009 y 2010 (entre las que se incluye las concedidas a la Faffe) -que entre otras conclusiones dictaminó que el 89% de las ayudas se dieron sin concurrencia competitiva (a dedo)-, Ruiz García abundó y dijo que "la mejor vacuna es poner sobre la mesa informes veraces, objetivos y rigurosos, aunque al PP le moleste que hayamos hecho las cosas bien". A su juicio, el informe de la Cámara de Cuentas, que dirige Antonio López, va a "arrojar luz" sobre aspectos que "pueden ser corregidos" y también sobre aquellos que "se han hecho bien".

El portavoz de IU, Ignacio García, recordó que su formación, al menos desde 2008, sí ha ejercido la labor de control y ha formulado preguntas sobre la Faffe pero sostuvo que la intención del PP de crear una comisión de investigación responde a "intereses electorales". "Con el PP de esta legislatura no sirven, no funcionan" y añadió: "Cuando ha tenido la oportunidad, ha demostrado que su interés no es conocer la verdad, sino bastardear sus conclusiones", espetó García que concluy que es "muy difícil" que en esta legislatura se puedan crear comisiones de investigación.

Por su parte, el portavoz del PP, Rafael Ruiz Canto, explicó que su grupo respalda las propuestas de IU y el PSOE porque "cuantas más iniciativas fiscalizadoras, mejor", pero insistió en que es obligatoria una comisión de investigación. "Nosotros hemos pedido una investigación de todas las subvenciones extrañas, que se han ido dando fuera de todo el ámbito de control, en las que ha participado la Faffe", puntualizó el dirigente popular, que ha afirmado: "Aquí no estamos hablando de una organización para servir a la ciudadanía, sino del libro de familia socialista".