Un agente del Servicio Marítimo de la Guardia Civil resultó ayer herido con contusiones en el costado, la espalda y el cuello cuando una patrullera de la Royal Police embistió por dos veces un bote -recién incautado con tabaco de contrabando- que pilotaba hacia el puerto de Algeciras. Después de pasar por el médico, el agente fue dado de baja con un tratamiento para recuperarse de los golpes.

El incidente se produjo alrededor de las 11:30 después de que el Servicio Marítimo recibiera el aviso de que había varios pequeños barcos realizando actividades sospechosas en el llamado Boquete de Poniente. Cuando la Guardia Civil se aproximó a la zona con la semirrígida Sierra III, las embarcaciones se dieron a la fuga, pero una fue apresada con tres ocupantes que inmediatamente pidieron a los agentes que los dejaran porque se encontraban, según dijeron, "en aguas gibraltareñas" en las que no tenía jurisdicción.

En el barco llevaban aproximadamente 300 cajas de tabaco de contrabando, según comprobaron luego los guardias civiles, que explicaron a los supuestos contrabandistas que estaban en aguas españolas y les informaron de que iban a escoltarlos hasta Algeciras para hacer los trámites de la infracción. Como estos insistieron en negarse, un agente saltó al barco incautado para pilotarlo él. Fue entonces cuando apareció una patrullera de la Policía de Gibraltar que insistió a los guardias civiles que dejaran la embarcación porque, en su opinión, ésta se encontraba en sus aguas. Estos se negaron, les explicaron que habían aprehendido tabaco ilegal e informaron a los agente del Peñón que se dirigían hacia Algeciras para tramitar la infracción.

En ese momento la Policía gibraltareña embistió por primera vez el barco de recreo con el guardia civil al mando y los tres supuestos contrabandistas a su lado. El agente, pese al ataque, continuó el camino y entonces la patrullera del Peñón volvió a golpear la embarcación que pilotaba, esta vez con mucha más vehemencia.

La virulencia del golpe hizo que el miembro de la Benemérita se golpeara con fuerza en el costado, la espalda y el cuello al caer dentro del bote. Los otros tres ocupantes también resultaron lastimados y, de hecho, una vez que fueron liberados, acudieron a un centro de salud de La Línea. Durante la violenta persecución por mar aparecieron en la zona dos barcos de la Royal Navy y uno más de la Policía de Gibraltar. En auxilio de la Guardia Civil acudió la patrulla de La Línea, que se hizo cargo de los tres detenidos y llevó la embarcación a la zona de Crinavis.

Éste no es el primer incidente que se produce en la Bahía de Algeciras a raíz del recrudecimiento del conflicto de la Verja. De hecho, a primeros de abril la Asociación Unificada de Guardias Civiles exigió "un respaldo claro y decidido" para los agentes que trabajan en la zona del Peñón y que se "deslinde" éste del servicio que tienen que realizar las patrulleras de ambos países en la zona para volver a trabajar "codo con codo" como antes. "Tarde o temprano se producirá algún incidente con consecuencias más graves que los habidos hasta ahora", advirtieron los guardias civiles entonces.

Por otro lado, el ex parlamentario de IU Antonio Romero, en una carta abierta a Mariano Rajoy con motivo de las elecciones europeas incluyó a Gibraltar como uno de los paraísos fiscales a eliminar. "Gibraltar es un nido de delincuencia que vive de las mafias que blanquean su dinero, que cuenta con leyes laxas que los protegen. El contrabando de tabaco es un negocio floreciente", manifestó.