Los secretarios generales de CCOO y UGT de Andalucía,  Francisco Carbonero y Carmen Castilla, respectivamente, han emplazado este jueves al Gobierno andaluz a impulsar la concertación social, a su juicio en "punto muerto", y han defendido su utilidad para acabar con la crispación social y generar empleo. 

Castilla y Carbonero, que han participado en un desayuno informativo del Fórum Europa. Tribuna Andalucía, han defendido una reforma de la Constitución y han reivindicado el valor del trabajo sindical en la defensa de las libertades y del progreso, así como su contribución en la mejora de las condiciones de vida de los trabajadores. 

A pesar de la "pérdida de reputación" de los sindicatos y de la "campaña de acoso mediático a UGT", han defendido la legitimidad de estos dos sindicatos como agentes sociales reconocidos en la Constitución, en el Estatuto de Autonomía y refrendados por los trabajadores en las elecciones sindicales para participar en los procesos de diálogo social. 

En este sentido, Carbonero ha precisado que otros interlocutores, en alusión a la patronal de la economía social CEPES, no tienen esa legitimidad, pero "tienen cosas que aportar y habrá que buscar fórmulas" para tenerlos en cuenta. 

"CCOO no busca fotos de portada con el diálogo social", ha remachado Francisco Carbonero, quien ha afirmado que "no le acompleja" negociar acuerdos de concertación, a pesar de que "se está demonizando" este tipo de pactos, que, a su juicio, "siempre han sido positivos en Andalucía". 

Para la secretaria general de UGT-A, es la "hora de un pacto por la generación de empleo" y ha tendido la mano a los partidos y a las organizaciones sociales para llegar a un acuerdo que permita salir de la crisis y bajar el nivel de crispación social. 

Sus propuestas para el pacto pasan por una renta básica, por la banca pública, por el desarrollo de industrias con futuro como las energías renovables y la aeronáutica y por reforzar los servicios públicos. 

Con estos planteamientos los sindicatos buscan combatir "la pobreza" generada por las políticas del Gobierno del PP que han conducido a que más de medio millón de hogares en Andalucía tengan todos sus miembros en paro, a más de un millón de parados, a una gran bolsa de desempleo de larga duración y a una creciente economía sumergida, entre otras desigualdades sociales, han denunciado. 

"El combate contra la pobreza es importante no a través de la caridad, sino mediante la garantía de los derechos", ha sostenido Carbonero, quien ha reiterado la petición al Gobierno central para que apruebe un plan de empleo en Andalucía. 

Precisamente, la dirigente de UGT ha apostado por acometer una "verdadera carta de derechos ciudadanos" para definir el concepto de umbral de pobreza, y a partir de ahí elaborar leyes de renta básica y de inclusión social y de apoyo a las familias y la infancia. 

La reforma constitucional es otro de los asuntos abordados por los dirigentes sindicales en sus intervenciones y han respaldado una reforma de la Carta Magna, pero con cautela y sin prisas "no vaya a ser que se haga una gran chapuza", ha advertido Francisco Carbonero. 

También han expuesto su preocupación por el debate sobre el cambio en el modelo de Estado y han alertado de que Andalucía no debe quedarse en un "segundo plano y liderar la igualdad".