Dos de los tres jóvenes turcos que fallecieron el lunes ahogados en una playa de Marbella trataron de salvar a la tercera de las víctimas mortales, que se estaba bañando y se encontraba en dificultades. Fuentes próximas a la investigación informaron ayer de que el monitor y dos jóvenes se lanzaron al agua al comprobar que un compañero tenía problemas para salir del mar, con el resultado final de tres fallecidos y otro estudiante en estado crítico en el hospital.

Los fallecidos pertenecían a un grupo de estudiantes y profesores de la localidad turca de Canakkale Gelibolu (Galípoli) y participaban en un programa de Erasmus Plus en Marbella.

Los fallecidos son dos jóvenes sordomudos de 17 y 18 años y un monitor de 30 años, mientras que el hospitalizado, que permanece en la UCI del Hospital Costa del Sol pendiente de su evolución, tiene 16 años.

La Guardia Civil y el Juzgado de Instrucción número 1 de Marbella se han hecho cargo de la investigación y los cadáveres han sido trasladados al Instituto de Medicina Legal de Málaga para realizarles las autopsias.

Representantes políticos y miembros de la Embajada de Turquía en España guardaron ayer un minuto de silencio ante el Ayuntamiento de Marbella en recuerdo de los fallecidos.

El Gobierno de Ankara tenía interés en trasladar a Turquía al superviviente; sin embargo, tras una visita al hospital y comprobar que "todo funciona a la perfección", las autoridades turcas decidieron que el joven permanezca en Marbella, de modo que su recuperación "sea tranquila".

Representantes de la Embajada de Turquía se han desplazado a Marbella para preparar el retorno "inmediato" de los compañeros de los jóvenes fallecidos, de modo que puedan reencontrarse con sus familias y "calmar así la ansiedad".