El bebé de dos meses y medio ingresado el jueves en el Hospital Materno de Málaga tras ser, supuestamente, maltratado por sus padres permanece estable y, según la delegada de Igualdad y Bienestar Social, Amparo Bilbao, "podría estar en el hospital aún dos o tres días". El menor sufre fracturas en algunas partes de su cuerpo, según confirmaron fuentes sanitarias.

Bilbao señaló ayer que a lo largo de esta semana el personal de la Delegación estudiará la situación personal del bebé así como el posible interés de otros familiares en hacerse cargo de su custodia -fuentes cercanas a la mujer detenida señalaron a este diario el sábado que la abuela materna la iba a reclamar-, aunque, no obstante, la Junta analizará la capacidad y la conveniencia de esos familiares para quedarse con el menor. Mientras tanto, el bebé estará tutelado por la Junta y, dada su corta edad, podría derivarse a una familia de acogida con carácter de urgencia en lugar de a un centro de acogida de menores.

Por otra parte, en la mañana de ayer el Instituto Médico Legal de Málaga realizó la autopsia al bebé que resultó muerto el sábado y que era hermano mellizo del que permanece ingresado. Fuentes de esta institución señalaron que las conclusiones de la autopsia están bajo secreto de sumario y fueron enviadas al Juzgado de Torremolinos que lleva el caso.

El bebé fallecido había sido ingresado el jueves en el Materno por sus padres, una joven pareja de nacionalidad rusa y ucraniana. El médico que los atendió, al comprobar signos de violencia en el pequeño, dio aviso a la Policía Local, que detuvo a los padres y posteriormente el juez decretó su ingreso en la prisión de Alhaurín de la Torre.

Se da la circunstancia de que, según informaciones de fuentes cercanas al caso, los padres de los mellizos habrían intentado descargado responsabilidades ante la Policía, sin éxito, en una niñera que, según estas fuentes relataron a los servicios informativos de Antena 3, habría sido contratada para que la pareja pudiera salir de copas la noche de los hechos.