La Consejería de Educación abrió hace un año el debate sobre el uso de los uniformes en los colegios públicos de la comunidad. El propio presidente de la Junta, José Antonio Griñán, abogó por su uso en estos centros, al considerar que esta práctica "impediría que los niños compitan por algo tan estúpido como es lo externo". "No hay cosa más enojosa que un niño de diez años discutiendo sobre la ropa que tiene que ponerse para ir al colegio", añadió entonces.

El debate que abrió Educación, con Mar Moreno como consejera, tuvo ayer su cierre al aprobar el Consejo de Gobierno los decretos que desarrollan los reglamentos de funcionamiento de los centros educativos.

La posibilidad sobre el uso de los uniformes se recoge en el decreto que aprobó el reglamento para centros de Educación Infantil y Primaria y centros de Educación Especial. No así para los de institutos, sobre los que no aparece mención a la vestimenta.

Por primera vez una normativa regional se hace eco por escrito de este debate, fomentado en ocasiones por los padres en los centros escolares.

El texto del decreto, pendiente de publicación en el BOJA, recoge la posibilidad de establecer un uniforme para el alumnado. Sin imposiciones. Y ,en el supuesto de que el centro decidiera el uso de un uniforme, "éste, además de la identificación del centro, llevará en la parte superior izquierda la marca genérica de la Junta de Andalucía asociada a la Consejería competente en materia de educación".

El logo de la Junta tendrá que ir unido al del centro, por lo tanto, asunto que tienen que conocer los proveedores de uniformes. Desde hace unos años, algunos centros públicos de la región han optado por esta opción y otros la han utilizado exclusivamente para la ropa deportiva. Pese a todo, es aún una opción minoritaria. En tiempos de crisis, asociaciones de padres entienden que esta medida puede suponer un ahorro económico para las familias.

Otras comunidades como Madrid o Valencia también intentaron incentivar el uso de la vestimenta escolar en los centros públicos.

La reforma del reglamento aúna en un reglamento las distintas normas vigentes desde 1997, que se actualizan para dar respuesta a las nuevas demandas de los centros educativos.

El consejero de Educación, Francisco Álvarez de la Chica, explicó en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno, que las nuevas normas, elaboradas tras un intenso proceso de diálogo con todos los sectores de la comunidad educativa (sindicatos, profesorado y familias) serán de aplicación en todos los centros docentes públicos andaluces a partir del próximo curso escolar.