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"El Ayuntamiento está gravemente enfermo"

  • La primera edil del Ayuntamiento de Santiponce confía en revertir la penosa situación en la que se ha encontrado el Consistorio, con una deuda de 750.000 euros

El pasado 16 de mayo, la inacción de Izquierda Unida en el gobierno del Ayuntamiento de Santiponce cesó gracias a la moción de censura impulsada por el PSOE y secundada por el PA. Así, Carolina Casanova se convirtió en la primera alcaldesa de un consistorio milenario. Lo que se encontró cuando abrió la caja, aunque ya lo intuía, la dejó sin aliento, pero lejos de venirse abajo, su firme voluntad es la de levantar el municipio y volver a ilusionar a los poncinos.

-¿Cómo se ha encontrado el Ayuntamiento de Santiponce?

-Se han pagado ya dos nóminas, pero se deben 750.000 euros del IRPF, que es inaplazable, porque la sanción de los intereses son casi 400.000 euros. El resultado presupuestario de 2015 fue un millón y medio de euros en negativo porque no se siguió el plan de proveedores, y el endeudamiento acumulado es del 103%. Aquí se han dedicado a vivir al día y a no cumplir con nadie: república comunista total. Y ni siquiera han mantenido ninguna de las infraestructuras realizadas por el PSOE en anteriores legislaturas. Uno de los grandes problemas es que el capítulo 1, que tiene que llegar a un 40% del presupuesto, está en un 70% ahora mismo. Si los ingresos son los que son, no se cubre nada. Aquí hay un problema de fondo: tú no puedes estar subiendo los impuestos constantemente para mantener las nóminas desorbitadas del personal del Ayuntamiento (hay algunos que ganan 45.000 euros al año), y sin prestar ningún servicio a los vecinos. El nivel de endeudamiento al que ha llegado el Ayuntamiento provoca que no haya proveedores que quieran suministrarte servicios. En 45 días me han cortado el teléfono tres veces y en cualquier momento me cortarán la luz y el agua. Tampoco hay seguros de responsabilidad patrimonial por si a algún vecino le pasa algo en la calle. Los vehículos municipales no tenían ni la ITV pasada. Y lo más fuerte ha sido que el ex alcalde, José López, no pidió ni el Plan Supera IV, siendo seguramente el único municipio de toda la provincia en no solicitar ese magnífico programa de la Diputación, ni el PER.

-Teniendo en cuenta la desastrosa gestión de IU en estos cinco años (4+1), ¿le merece la pena el Tourmalet que tiene que subir en los próximos tres años?

-Sí, porque creo que Santiponce puede y debe ser, con el patrimonio cultural que tiene, referencia en el ámbito europeo, porque tenemos el monumento romano más importante de Andalucía. Hay que ponerse a trabajar para que se nos vuelva a dar el lugar que nos corresponde y reivindicar la identidad cultural que tiene este municipio. Y es que son siete kilómetros de patrimonio cultural. Tenemos que crear industrias auxiliares de turismo, que son las que generarían empleo. La clave es la explotación turística de la cultura. Para eso, hay que hacer una buena ordenación económica y formar a los vecinos, que no se identifican por ahora ni con el Ayuntamiento ni con las dos fuentes de riqueza del pueblo (Itálica y el Monasterio San Isidoro del Campo), porque piensan que de ahí podrían sacar empleo y no pueden por la exigente normativa existente, por los parámetros que hay que cumplir para montar cualquier negocio alrededor del conjunto arqueológico. Pero si el emprendedor no hace ese esfuerzo inicial, no se puede crecer. Con respecto a Itálica, las tres administraciones (Junta, Diputación y Ayuntamiento) no pueden estar enfrentadas, estamos condenados a entendernos. Si queremos estar al nivel de Mérida, quizá hay que darse una vuelta por allí y darse cuenta del esfuerzo que han hecho los emeritenses por profesionalizar los servicios al turista.

-Es clave la promoción de un monumento que mucha gente se olvida de que es poncino...

-Claro, tenemos el deber de divulgar ese patrimonio. Son las Ruinas de Itálica de Santiponce, provincia de Sevilla, no de Sevilla.

-¿Cuál es el gran reto que le queda por delante?

-El gran reto es la regularización económica de este municipio. Haciendo el símil, este Ayuntamiento está gravemente enfermo. Lo hemos tenido que llevar al hospital en estado de shock, señalado de muerte, cuando quizá se podría haber puesto unos remedios previos y haberlo trasladado en ambulancia a un centro de salud hace muchos años. Cuando logremos el sostenimiento económico del edificio que debe prestar todos los servicios, entonces se podrán establecer unas medidas de control y desarrollo que puedan generar empleo. Hay que empezar a ponerle el tratamiento de choque al enfermo, y esa cura debe ir de la mano de todas las administraciones públicas.

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