Una vez dejado atrás el drama de la posible liquidación del club, una realidad que no se puede olvidar y que sigue latente en el día a día de la entidad ya que se trabaja en encontrar un grupo que adquiera el paquete accionarial, toca ponerse las pilas a nivel deportivo. Las fechas en el calendario avanzan sin cuartel para todos los equipos y a falta de 57 días para el comienzo de la nueva temporada, el CB Sevilla comienza a dilucidar algunos asuntos capitales conforme a la confección de la plantilla.

El primero de estos pasos llegó con la oficialidad el pasado miércoles del secreto a voces que suponía la renovación de Luis Casimiro, resolver el puzle de quiénes serán los jugadores que completen el plantel es la siguiente cuestión a tratar. Por ello, las horas de trabajo en las oficinas de San Pablo se acumulan de forma importante.

Así las cosas, el primer movimiento importante relativo a la plantilla se produjo en el día de ayer, cuando el club hispalense anunció la renovación de Ondrej Balvin por una temporada más. El acuerdo entre ambas partes se vino forjando en las últimas fechas, tal y como puntualmente ha ido informando este periódico aunque no fue hasta media tarde de ayer cuando se hizo oficial la continuidad del interior de 2,17 metros, pese a que su continuidad a primeras fechas de verano se antojaba complicada.

Una vez hecha oficial la renovación del interior, Balvin se suma a Niko Radicevic y Pierre Oriola como los únicos activos de la primera plantilla hasta la fecha de la entidad hispalense. El próximo en anunciar su vinculación con el club debe ser Berni Rodríguez, quien por segunda temporada capitaneará la nave cajista. El acuerdo con el exterior malagueño está casi sellado y al mismo prácticamente sólo resta que las partes lo hagan oficial.

El CB Sevilla ya dejó claras las intenciones de contar con el cinco la temporada venideracuando lo incorporó a la lista de tanteo junto a Ben Woodside, aunque ni el norteamericano ni el pívot recibieron ofertas de otros clubes, por lo que los derechos ACB de ambos jugadores permanecen en el club.

El yanqui fue de los primeros en abandonar el barco con dirección Türk Telekom otomano, mientras que Balvin, tras una temporada con un mal inicio debido a la falta de protagonismo que tuvo con Scott Roth en el banquillo -incluso el director deportivo, José Luis Galilea, lo estuvo ofreciendo en el mercado-, decidió hacer las maletas para probar suerte en uno de los clubes más importantes del continente, el Maccabi Tel-Aviv israelí.

El rol del interior con la llegada de Luis Casimiro cambió y el papel de los interiores fue mayor que con el técnico norteamericano, en cuyo sistema prevalecía el juego exterior -y con ciertas dosis de caos-, por lo que una vez confirmada la continuidad del ciudadrealeño como entrenador del plantel, es de entender que el checo, que el próximo mes de septiembre cumplirá las 23 primaveras, haya valorado para bien continuar una temporada más en Sevilla pese a los cantos de sirena que han llegado a sus oídos, algunos procedentes desde Gran Canaria.

Así las cosas, el pívot nacido en Usti nad Labem jugará su sexta campaña en las filas hispalenses, toda vez que el internacional checo aterrizó en Sevilla en 2010 procedente de los escalafones inferiores del USK Praga. Desde su llegada, no ha parado de crecer. En la campaña 2011-2012 disputaría sus primeros cuatro partidos con el primer equipo del por entonces llamado Cajasol Banca Cívica. No fue hasta el curso 2012-2013 hasta el que el interior fue considerado como un jugador importante dentro de la rotación.

A la par de gestionar la continuidad de Balvin la próxima temporada, los rectores cajistas rastrean el mercado para satisfacer las necesidades de Casimiro, quien maneja una importante lista de posibles refuerzos. Uno de los nombres que fueron vinculados en las últimas horas fue el de Jon Stefansson, quien abandonó el Unicaja pese a la insistencia de Joan Plaza y que, según apuntan desde Encestando, contaba con una oferta sobre la mesa de Estudiantes que el islandés ha rechazado. El escolta de 32 años, según la misma información, prefiere aguantar más en el mercado y jugar el Eurobásket con su selección hasta que aparezca una oferta que lo convenza.

Mientras Stefansson continúa deshojando la margarita, el club continúa trabajando en las primeras opciones. Kirksay, que el próximo mes alcanzará los 36 años, sigue siendo el favorito, aunque no llegaría a cualquier precio, máxime con el estrecho margen de maniobra económico que tiene el club en estos momentos.

Regresar a la que fue su casa, donde todavía se lo recuerda como un ídolo, y cobrar fielmente a final de mes son algunas de las bazas para atraerlo.