Un balance triunfalista de la fiesta más importante de la ciudad. El alcalde de la ciudad asegura que los datos de la Semana Santa de 2014 son ya como los anteriores a los años de la crisis económica. Según la versión de Juan Ignacio Zoido, en la Semana Santa no sólo habría brotes verdes, sino una recuperación consolidada de los registros de consumo, pernoctaciones hoteleras y participación ciudadana. Se ha rozado el lleno de los hoteles, se ha recaudado más en los bares, se han recibido más viajeros en el aeropuerto y visitantes en el Alcázar y se han vendido más cervezas y refrescos en las tabernas que en años anteriores, cuando la lluvia truncó varios días de la Semana Santa (el Martes Santo se ha quedado inédito tres años consecutivos). El alcalde compareció arropado por tres concejales del gobierno (Gregorio Serrano, Maximiliano Vílchez y Dolores de Pablo-Blanco) y varios altos cargos con competencias en los servicios municipales de Semana Santa (director de Seguridad y Movilidad, director de Fiestas Mayores, director del Consorcio de Turismo y director del Cecop y director de Seguridad y Movilidad). Zoido quiso escenificar y capitalizar el éxito de la gestión de una fiesta seriamente marcada por la lluvia en el último lustro. Salieron todas las cofradías (porque salir, salieron todas) y se pusieron en tensión todos los servicios. El alcalde refirió el caso de la Hermandad de la Sagrada Resurrección, que se tuvo que volver a su templo sorprendida por un aguacero. Pero este último percance no iba a empañar el balance oficial: "Todo ha salido bien. Hemos sido unos grandes anfitriones ante el asombro de todo el que ha venido de fuera. Hemos vivido una Semana Santa plena carente de incidentes". Para apuntalar sus conclusiones altamente positivas, el alcalde usó como referencia el último estudio encargado por el Ayuntamiento a la Universidad sobre el impacto económico de la Semana Santa: 240 millones de euros, un 1,22% del PIB local. Fue sobre este dato sobre el que aseguró que se han recuperado los registros de los años previos a la crisis económica, pero sin más precisiones que los números de los distintos servicios a lo largo de esta última Semana Santa. 

Para defender su tesis sobre la "mejor Semana Santa de los últimos años", el alcalde se basó en los datos de los servicios municipales y en los ofrecidos por algunas empresas privadas. Tussam ha registrado un 10% más de viajeros; Lipasam ha recogido un 19,2% más de residuos; los hoteles de la ciudad han registrado una ocupación de casi el 100% desde el Jueves Santo; el sector de la hostelería ha facturado un 30% más; el aeropuerto ha recibido un 1,8% más de pasajeros, con un total de 166.126 personas, y el Real Alcázar ha contabilizado 37.057 visitantes, un 19,86% más que en los días de la Semana Santa de 2013. 

En cuanto al dispositivo especial de prevención y seguridad, el alcalde ha precisado que la Policía Local ha registrado 1.980 incidencias, aunque ninguna de ellas de consideración. Destacan 700 pruebas de alcoholemia con resultado positivo en sólo 20 de ellas, lo que para el alcalde confirma el buen comportamiento de los ciudadanos en una fiesta como la Semana Santa; 174 actuaciones en materia de comercio ambulante y 470 servicios en materia de productos perecederos. Los servicios sanitarios atendieron 747 casos, entre los que destacan 222 lipotimias y sólo diez intoxicaciones etílicas. 

Para Juan Ignacio Zoido, el éxito de esta última Semana Santa refuerza la "marca Sevilla" y la proyección de la ciudad al quedar probada su capacidad de albergar grandes acontecimientos. Por este motivo, refirió que el vídeo promocional de la Semana Santa elaborado por el Ayuntamiento ha recibido más de 62.500 visitas desde hasta 58 países diferentes.