El nuevo hermanos de Pasión, José Luis Cabello Flores, que ha asumido el cargo tras la dimisión el pasado martes de Javier Criado, ha pedido a los hermanos unión y cohesión de cara al futuro. A través de una carta publicada en la página web de la corporación, ha expuesto a los hermanos que no se desvíen de los cuatro puntos que son el norte del día a día de la corporación: el culto a los titulares, la caridad a través de la fundación asistencial de la hermandad, la formación para la evangelización y la convivencia fraterna.

"Me atrevo a pediros que nos comportemos como una hermandad unida, cohesionada, prudente y rigurosa en todas nuestras manifestaciones. Os aseguro que yo voy a poner todo mi empeño en ello, en cada una de mis actuaciones como hermano mayor; pero eso sí, sé que voy a necesitar todo vuestro apoyo y comprensión para hacer las cosas bien. Y no tanto por mí mismo como por nuestra hermandad, que se merece lo mejor".

En declaraciones a este periódico, Cabello señaló que la hermandad ha superado numerosas dificultades en sus siglos de existencia y que la normalidad debe imponerse tras las acusaciones vertidas en los últimos meses contra el anterior hermano mayor: "Casi 500 años de historia, con avatares de todo tipo, éxitos rotundos y momentos de casi extinción, han acendrado tanto la imagen de nuestra hermandad, que es capaz de superar bastantes dificultades. Desde luego nunca es bueno que haya situaciones que puedan dañarla; y por eso, precisamente, el anterior hermano mayor tomó la decisión de renunciar a su cargo".

La hermandad celebrará en las próximas semanas los cultos anuales en honor a la Virgen de la Merced y está próxima a iniciar los actos con motivo del IV centenario de la talla del Nazareno de Pasión, que contribuirán a retomar la normalidad: "Sin duda. Los actos que estamos programando y que se darán a conocer totalmente en breve crearán un magnífico momento para permitir que todos podamos reunirnos en torno al Señor de Pasión que, como dijera un admirado escritor sevillano, 'nos espera siempre en la mirada baja de su belleza".

El cargo de teniente, como explica Cabello en su carta, será asumido por el archivero de la junta, Manuel Álvarez Casado, que compaginará ambas responsabilidades.