Importantes novedades. El Consejo de Cofradías tiene en el horno las normas de obligado cumplimiento para las cofradías de cara a la próxima Semana Santa y contempla algunos cambios de relevancia. La institución que aglutina a todas las hermandades y vela por el buen discurrir de los cortejos procesionales quiere que todas las cofradías que cuenten con más de mil nazarenos de luz en sus filas formen de a tres por la carrera oficial. Además, sopesa incluir, al menos, un nuevo punto de control en la carrera oficial, situado en la calle Sierpes. El documento está en preparación y debe ser sancionado y ratificado por el vicario general, Teodoro León Muñoz.

El Consejo de Cofradías, cuya junta superior afronta su última Semana Santa, estudia implantar una medida que generará mucha controversia en las hermandades, sobre todo en las que procesionan con el cirio al cuadril: la obligatoriedad de discurrir de tres en tres cuando el número de nazarenos de luz supere los mil, una medida que afectaría a un buen número de corporaciones. Hasta ahora, la normativa fijaba en su primer punto, apartado d, que "las cofradías deberán marchar comprimidas, sin cortes ni separación entre ellas y, en caso de ser necesario y a criterio del delegado de día -expresado personalmente o por cualquier otro miembro de la junta superior- formando los nazarenos de a tres, especialmente por la carrera oficial". Esta sugerencia pasaría a ser de obligado cumplimiento a partir de esta Semana Santa.

El criterio de las hermandades para poner los nazarenos de tres en tres es hasta ahora muy dispar. La mayoría de las corporaciones de capa con un abultado cuerpo de nazarenos ya procesionan de esta manera, al menos así figuran algunos de sus tramos. También hay algunas cofradías cuyos nazarenos llevan el cirio al cuadril que no tienen más remedio que ponerse de a tres para cumplir el horario. Por contra, hay hermandades que prefieren comprimir al máximo sus cortejos pero respetando las clásicas parejas, sobre todo las de cola. De aprobarse definitivamente la medida, el cortejo del Gran Poder, por ejemplo, debería pasar por la carrera oficial de tres en tres y con los cirios abajo. Los tramos de penitentes formarían de a cuatro.

El Consejo también quiere implantar nuevos puntos de control horario en la carrera oficial. Para ello se estarían estudiando dos posibles ubicaciones. Con casi toda seguridad habrá una nueva mesa en la calle Sierpes, en un lugar todavía por determinar. El Consejo quiere velar de este modo porque se cumplan los tiempos en la calle Sierpes, donde muchas hermandades discurren de manera más relajada tras pasar por el palquillo de la Campana, donde se toma el tiempo de la cruz de guía, y cada uno de los pasos. Hasta ahora, se marcaba como referencia final el paso del último miembro del cortejo (normalmente los músicos de los pasos de palio) por la esquina de la confitería. Ahora, se podrá tener una referencia mucho más fiable y un lugar de registro intermedio. También se podría situar otra comprobación en la Avenida de la Constitución.