Los médicos de cupo y zona, una figura a extinguir en el actual sistema sanitario, se sienten "infrautilizados y coaccionados" por el SAS y acusan a la Administración de reducir al máximo la posibilidad de atender a pacientes, pese a las listas de espera en la atención especializada. "En los diez primeros meses del año sólo he visto a 14 pacientes y en agosto ni a uno solo, pese a la demanda", explica el doctor de cupo y zona José Manuel García, delegado del sindicato CSI-F para este grupo de médicos.

Alrededor de 150 profesionales continúan en sus puestos como médicos de cupo y zona en Sevilla. Son profesionales veteranos que en la década de los ochenta se negaron a incorporarse al actual modelo sanitario, que está basado en una jerarquía hospitalaria, bajo la gestión de la comunidad autónoma. "Al negarnos a entrar en el sistema jerarquizado, el SAS comenzó a perseguirnos. La Administración nos ha reducido al máximo legal el número de pacientes, limita nuestra actividad quirúrgica y nos impide acceder a la carrera profesional, entre otras medidas, que suponen una importante reducción de sueldo", denuncia el portavoz del CS-IF. Se da, de este modo, la circunstancia de que un especialista de cupo puede tener un sueldo base de 1.000 euros, si bien la nómina es superior gracias a otros capítulos, como la antigüedad.

 "Otro problema está en que nuestra nómina continúa calculándose en función de las antiguas cartillas, cuando hoy en día no existen. Hoy el sistema funciona con las tarjetas individuales sanitarias", incide el doctor García. Una reivindicación histórica de los médicos de cupo y zona al SAS es una explicación sobre cómo se pueden calcular nóminas con bases de datos que ya no existen. Las bases de datos de pacientes funcionan actualmente a través de las tarjetas individuales sanitarias.

"Desde 1999, cuando comenzó la conversión de las bases de datos (las cartillas de la Seguridad Social con uno o varios beneficiarios dejaron paso a las actuales tarjetas individuales) los médicos de cupo y zona tenemos el sueldo congelado", denuncia. Se trata de un problema enquistado desde hace décadas, que se encuentra a la espera de la decisión del Tribunal Supremo, que tendrá la última palabra en este conflicto.

Los médicos de cupo, que son propietarios legales de sus plazas, optaron por no integrarse en el modelo jerarquizado por diversos motivos: querían mantener su cupo de pacientes de siempre; no les interesaba la propuesta de la administración que suponía aumentar la jornada laboral, lo cual les impedía trabajar en la sanidad privada, por ejemplo.

Otra de las reivindicaciones de este colectivo de médicos es la carrera profesional. Cada comunidad autónoma sigue un modelo y en Andalucía -frente a otras regiones como Asturias y Baleares o Cantabria- no reconoce a los médicos de cupo y zona en la carrera profesional, de modo que estos facultativos se ven impedidos para poder promocionar, frente a otros compañeros. "Nos niegan el derecho a cualquier reconocimiento en nuestro trabajo, una situación que nos coloca en desigualdad con el resto de especialistas". La posibilidad de acceder a la carrera profesional también se encuentra en proceso judicial, en el Tribunal Supremo.