El Sevilla, igual que está tratando de cerrar fichajes para el primer equipo, lo hace para el filial y el nivel de futbolistas que la dirección deportiva maneja se eleva por cuanto la idea es competir en Segunda División y tratar de que algunos de sus jugadores puedan en un futuro dar el salto o ayudar al primer equipo en algún momento.

En este sentido, uno de los marcados en rojo es un jugador español, Toni Calvo, pero que juega en la liga griega, en concreto en el Aris de Salónica. Con sólo 21 años, es un extremo que los técnicos conocían de su etapa en el Barcelona B y en las categorías inferiores de la selección (internacional sub 20). Lleva un año en Grecia y está deseando volver, aunque el coste de la operación es algo alto (en Grecia los sueldos no son bajos), teniendo en cuenta que el club no quiere repetir la costosa inversión de la temporada pasada en fichajes del filial.

Varios de los pupilos de Galeote se van a despedir este fin de semana y uno de ellos puede ser Pablo Sánchez, precisamente el hombre al que sustituiría Toni Calvo.