Finalizada la jornada vigésima tercera de este campeonato, pocos, por no decir ninguno, podían augurar que el Athletic, consolidado en la cuarta plaza desde el inicio del campeonato, tendría en el Sevilla a su rival por un puesto en la Liga de Campeones. Entonces, los de Unai Emery habían comenzado la segunda vuelta del campeonato con un punto en cuatro jornadas, lo que los colocaba octavos a 13 puntos del equipo vizcaíno.

La espectacular racha del equipo sevillista, con nueve victorias en los diez últimos encuentros ligueros -a lo que añade sus remontadas en la Liga Europa- lo han disparado en la clasificación hasta dejarlo a sólo tres puntos del equipo dirigido por Ernesto Valverde. De esta forma, el duelo del próximo domingo en San Mamés se ha convertido en un pulso por la Champions en toda regla, otorgándole una emoción inesperada a la lucha por la cuarta plaza, una situación similar a la que se vivió el pasado año entre la Real Sociedad y el Valencia.

El conjunto donostiarra, como ahora el Sevilla, realizó una segunda vuelta casi al nivel de los dos grandes y los 40 puntos que añadió a su casillero en ese segundo tramo del campeonato le sirvieron para superar al Valencia en la última jornada, precisamente tras caer el conjunto ché en Nervión.

La regularidad exhibida por el Athletic le ha valido para consolidarse en el segundo escalón de la Liga de la mano de Valverde, que ha recuperado la versión más intensa su equipo, sobre todo cuando actúa como local. 12 de los 18 triunfos del Athletic han tenido a San Mamés como testigo, un escenario del que sólo Espanyol y Atlético han sido capaces de llevarse los tres puntos. Con un Aduriz en racha, que suma 16 goles en la Liga -su mejor marca de siempre-, 12 de ellos en la segunda vuelta, el equipo vizcaíno pretende ocupar el sitio de sus vecinos de San Sebastián en la Liga de Campeones.

La inercia ganadora del Sevilla de Emery no conoce distinciones y sus registros goleadores colocan a los de Nervión a la altura de sus mejores años de este siglo y los 103 goles que acumula en todas las competiciones se encuentran a únicamente diez del alcanzado en la 2007-08, la temporada más goleadora de su historia.

Emery ha encontrado un equipo reconocible, en el que puede mover piezas sin que se altere el resultado final y con una pareja de goleadores en plena forma. Bacca y Kevin Gameiro acumulan 14 dianas cada uno en el campeonato liguero y le otorgan al Sevilla un fondo de armario necesario para ofrecer el mejor rendimiento en todas las competiciones. San Mamés bien vale una Liga de Campeones y el Sevilla ya le ha lanzado el reto al Athletic.