La plantilla está cerca de completarse con la llegada de Tremoulinas. Sevilla y Dinamo de Kiev están acercando las posturas y es posible que se cierre su traspaso en breve. Con su llegada, Monchi habrá puesto en manos de Unai Emery una plantilla, a priori, renovada y muy competitiva. Pero cierto sector de la afición sigue sin comprender que el Sevilla vaya a ingresar, aun en pagos aplazados, más de 40 millones de euros por Rakitic y Alberto Moreno y apenas vaya a invertir unos 12 ó 13 millones, sin contar los 6 de la opción de compra de Iago Aspas. A José Castro se le inquirió sobre la petición de que ponga el dinero en el campo. Y el presidente defendió su idea de austeridad, mientras Monchi explicó que el Sevilla invierte en salarios más que en traspasos.

"Este club tiene que estar saneado, vamos a hacer un equipo competitivo, pero mirando la economía -argumentó-. No me gustaría verme como otras entidades que han gastado más de lo que podían. La temporada pasada ya hicimos un equipo competitivo y sin hacer alardes importantes". Según el presidente, con él al mando jamás va a llegar al Sevilla "un futbolista de relumbrón que cueste 20 millones". "Lo que sí tenemos es un buen director deportivo capaz de encontrar buenos jugadores a los precios que podemos pagar", dijo.

Monchi fue más allá, y aseguró que el Sevilla sí gasta, y mucho. "El dinero del Sevilla está en el campo, porque los jugadores del Sevilla cobran. Hacemos esfuerzos muy grandes, no en traspasos importantes, pero sí en pagar salarios importantes. Invertimos en poder tener a Gameiro o Bacca". Por esta regla de tres, por ejemplo, Banega sólo ha firmado por dos años más otro opcional, para no alargar un contrato muy costoso. "Si rinde en estos dos años, le seguiremos pagando bien en el siguiente", dijo Castro. Y por esa regla de tres, llegará Tremoulinas.

El jugador francés del Dinamo de Kiev es la opción prioritaria del Sevilla, que ha logrado limar la elevada petición inicial del club eslavo. El acuerdo puede cerrarse por bastante menos de la mitad de lo que pagó el curso pasado el Dinamo al Girondins de Burdeos (6,5 millones de euros).

Pero fichar al lateral, único refuerzo pendiente, no es lo que más preocupa a Monchi. El excedente de jugadores afecta y mucho. "Es nuestra principal preocupación, buscarles equipo a los jugadores que no tienen sitio". Es el caso de Cicinho, Jairo, Trochowski... Si no los coloca, Monchi no descartó inscribirlos en la LFP y dejarlos fuera de la lista A de la UEFA, para la que el Sevilla inscribirá a tres canteranos: Carlos Fernández, Cotán, Luismi y Juan Muñoz, que están a las órdenes de Unai Emery, son los principales candidatos.