Sergio Rico ya ejercía como segundo portero antes de firmar la renovación de su contrato hasta 2017. El meta de Montequinto compareció ayer en el Sánchez-Pizjuán para manifestar sus sensaciones tras la buena nueva y agradecer a Unai Emery y al club la confianza depositada. Tal es la fe en el futbolista que ya no volverá a jugar con el Sevilla Atlético, según el acuerdo tácito de renovación. 

"Son 14 años en este club, es mi segunda casa, es un sueño cumplido que llevo persiguiendo durante estos 14 años. Hoy podemos decir que se ha cumplido", afirmó el guardameta de Montequinto, que recordó su debut liguero este año: "Yo tuve esa oportunidad en el tercer partido de Liga contra el Getafe. Salió estupendamente. Desde aquí quiero agradecer al míster la confianza puesta en mí". 

Emery le dio los galones de titular en Rotterdam, hasta donde viajaron Beto y Barbosa. Las cartas están claras. El año que viene, el Sevilla tendrá a Sergio Rico de portero, no se sabe muy bien si acompañado por el portugués, por el argentino o por otro meta. 

"No me considero ni primero, ni segundo ni tercero -argumentó cuando fue preguntado-; soy uno más que trabaja al cien por cien para, cuando sea necesario, disputar algún encuentro y estar preparado y a la altura", añadió Sergio Rico, que se acordó de su maestro Palop: "Tengo una gran amistad con él y me ha ayudado muchísimo. Siempre me ha dado muchísimos consejos y desde aquí le mando un fuerte abrazo".