No se esperaba una decisión definitiva hasta mañana, pero el Betis anunció pasado el mediodía que Pepe Mel será el entrenador con el que comience 2015 para optar a conseguir el ansiado ascenso. Como informó ayer este periódico, la cúpula del consejo de administración se reunió el viernes con el propio entrenador y su representante y la sintonía fue máxima. Pese a que Fernando Vázquez y Juan Merino estaban en la terna, el nombre de Mel, perfecto conocedor de la plantilla y de la casa heliopolitana, acabó por convencer a los dirigentes béticos. El madrileño firmó un contrato hasta el final de temporada que será ampliable dos años más en caso de lograr el ascenso de categoría.

La negociación fue más rápida de lo esperado. En el primer vis a vis entre las partes, los puntos en común, tanto en el área deportiva como en la económica, se impusieron a las posibles reticencias que pudieran existir. Como ha manifestado Ollero desde su llegada, el técnico tendrá opinión sobre las posibles incorporaciones, pero siempre contando con el trabajo de la dirección deportiva.

De hecho, para mañana está prevista una primera reunión entre el nuevo cuerpo técnico -Roberto Ríos y David Gómez lo acompañarán en su regreso a la entidad- y la dirección deportiva para tratar el asunto de los fichajes, la máxima prioridad una vez que el consejo ya decidió sobre el entrenador. El club comunicará a Mel el trabajo que se ha venido realizando en esta parcela y los primeros posibles refuerzos ya se pondrán encima de la mesa, toda vez que la idea de la entidad, más allá del nombre del técnico, era la de realizar varias incorporaciones en enero.

El técnico, por su parte, acudirá hoy al palco del Benito Villamarín, donde presenciará en directo el duelo ante el Racing, y, una vez que termine el importante encuentro será presentado a la plantilla antes de que ésta se marche de vacaciones, algo que estaba previsto que se realizase a la conclusión del mismo y hasta el próximo día 29. Juan Merino, mientras tanto, regresará al filial para continuar con el excelente trabajo que venía realizando hasta el momento y que incluso se ha visto más reconocido con su trayectoria con la primera plantilla.

La segunda etapa de Mel como técnico del Betis llega apenas un año después de su destitución y para intentar restablecer una normalidad deportiva que no existe desde su adiós.