La haltera española Lidia Valentín confirmó su condición de número uno continental en la categoría de 75 kilos tras revalidar ayer en Tiflis los títulos de campeona de Europa que ya conquistó el pasado año en las modalidades de arrancada, dos tiempos y total olímpico.

Valentín, cuarta en los pasado Juegos Olímpicos de Londres, se colgó su primer oro de la jornada en la especialidad de arrancada, tras imponerse con una marca de 118 kilos, tres menos de los que necesitó en 2014 en Tel Aviv para ceñirse la corona continental.

De hecho, la leonesa no necesitó ni tan siquiera acercarse a su propio récord de España, que estableció el pasado año con 124 kilos, para superar en la clasificación a la bielorrusa Darya Pachabut, plata con 117 kilos, y a la francesa Gaelle Nayo Ketchanke, bronce con 111.

La española, después del meritorio esfuerzo, declaró que no se sintió presionada por ser la favorita y que su objetivo se reducía a "hacer un kilo más que la primera". "Estoy muy feliz, ha sido una competición diferente a la del año pasado, pero me voy muy contenta con los tres oros. En arrancada hemos estado al límite, pero se ha podido ganar también el oro", dijo la leonesa a Radio Marca. Valentín añadió que no se fijaba en las marcas: "No era cuestión de arriesgar, sino de asegurar marcas e ir a por el oro".