A Jorge Molina le queda un año de contrato, pero hace algunas semanas el club le comunicó que se sentarían a dialogar cuando se consiguiera el objetivo para tratar su futuro. El excelente rendimiento del delantero, que ha superado su mejor registro goleador en el Betis, ha reforzado su figura, ante esa promesa pendiente de una reunión. El pasado verano, a Jorge Molina también le aseguraron que se revisaría su situación -con el descenso su contrato se rebajaba a la mitad-, algo que finalmente no sucedió.

"Por méritos no cabe ninguna duda. Por planificación y criterios técnicos, tampoco, pero ni siquiera sé si lo han pensado el míster y la dirección deportiva. Nosotros cumpliremos nuestra promesa y nos reuniremos con él", manifestó ayer el presidente, Juan Carlos Ollero, en Betis TV, donde se comprometió a cumplir esa palabra dada.

De momento, el entorno del jugador no ha recibido llamada alguna del club verdiblanco, aunque se confía en que ahora se pueda tratar este asunto. Jorge Molina siempre ha manifestado su deseo de continuar en el Betis, incluso ampliando su vinculación si fuera necesario. El capitán ha sido pieza fundamental desde la llegada de Pepe Mel, que siempre ha manifestado que sería su principal valedor para la próxima temporada. Las polémicas que rodearon al alcoyano a principios de temporada, cuando apenas contaba para Velázquez, ya quedaron en el olvido, como se comprobó en la misma celebración del ascenso, donde fue uno de los protagonistas principales.

Su pareja con Rubén Castro -entre ambos han sumado 51 goles- ha vuelto a ser fundamental para que el equipo verdiblanco retorne a Primera. 17 goles desde la llegada de Mel -sólo acumulaba dos con anterioridad- han aupado a Jorge Molina al cuarto lugar en la tabla de artilleros de Segunda, sólo por detrás de su compañero Rubén, de Borja Bastón (23) y Sergio Araujo (22).

Ese magnífico final de temporada de Jorge Molina le ha valido ganarse de nuevo un sitio principal en la plantilla verdiblanca de la próxima temporada. Ahora sólo falta que el club y el delantero definan cómo queda su futuro.