Rafael Nadal sabe que está atravesando su peor temporada como profesional. Lo reconoce y lo asume. Pero confía en trasladar las buenas sensaciones de los entrenamientos a la pista y dar alguna sorpresa en el US Open que arranca hoy.

"Estoy teniendo la peor temporada de mis últimos 11 años, pero pienso que todavía puedo ser un jugador peligroso", reconoció el balear, que debutará esta noche en el Arthur Ashe ante el joven croata Borna Coric esta madrugada. "Es un joven con mucha energía y es un gran competidor. Va a ser un partido complicado, pero, sinceramente, espero estar bien preparado para jugar", afirmó el mallorquín sobre su próximo rival, con quien se enfrentó en Basilea en octubre del año pasado. "Todo sirve como referencia. Aquel partido lo perdí porque él jugó mejor que yo. Mereció ganar. No recuerdo mucho, pero sí que estuve bastante mal", dijo Nadal en la rueda de prensa previo al comienzo del último Grand Slam de la temporada.

"Espero que sea otra historia. Creo que estoy mejor preparado de lo que estaba para aquel choque, así que veremos si soy capaz de jugar a buen nivel y que el resultado final sea diferente", destacó el actual número ocho de la clasificación mundial.

La derrota ante Coric, entonces de 17 años, marcó el final de la temporada 2014 para Nadal, que a la semana siguiente pasó por el quirófano para operarse de apendicitis. Acostumbrado a grandes regresos, al manacorí le ha costado esta vez en los torneos de mayor calibre, ya que la final que disputó en el Masters 1.000 de Madrid fue su mejor resultado en 2015, lejos de los parámetros de su carrera.

"Mi nivel de estrés es mucho más bajo que a principio de la temporada. Me siento mejor conmigo mismo de que lo que estaba hace un par de meses", destacó Nadal, ganador este 2015 en el polvo de ladrillo de Buenos Aires y Hamburgo y sobre en el césped de Stuttgart. "He trabajado un montón. Conozco el proceso y es un desafío encontrar el juego que he alcanzado muchas veces en mi carrera. Estoy entrenándome muy bien y ahora es tiempo de trasladarlo a la competición", insistió. Según explicó, al balear todavía le falta recobrar la confianza y eso sólo lo conseguirá ganando partidos.

Dos veces campeón en el US Open, el Nadal tiene metas diferentes para este año, en el que no es considerado entre los favoritos. "Competir bien y ganar sin problemas; eso sería un buen resultado", dijo el español. "Al no tener un bagaje de partidos como otras temporadas, vamos a ver qué pasa y qué resultado puedo lograr. Lo más importante para mí es competir a buen nivel y tratar de ganar la mayor cantidad de encuentros posibles", añadió el zurdo, de 29 años.

Ubicado en la parte superior del cuadro, en cuartos de final Nadal podría encontrarse con el serbio Novak Djokovic.

"Nadal ha vuelto antes y puede volver a hacerlo. Es una de las personas que le pone mas pasión y esfuerzo a su trabajo, pasa horas en la cancha cada día y se prepara para tratar de ganar. No puedes descartarlo, sería un absurdo", consideró el número uno del mundo en la misma sala de conferencias unos minutos antes.

El mallorquín agradeció el respeto de sus colegas, pero marcó la distancia a la que ve la segunda semana del US Open. "Ese partido sería en cuartos de final y tengo que pelear un montón para llegar hasta allí. Él probablemente piense que también debe esforzarse mucho para llegar. La cosa más importante para mí es verme de nuevo jugando a un alto nivel", expresó Nadal