Con el punto de mira en la segunda posición de la tabla de clasificación, y con la posibilidad matemática de certificar la tercera plaza, viaja el Sevilla Atlético a Almería para enfrentarse al filial rojiblanco, ya descendido matemáticamente a Tercera División pero que confía en dar la campanada y competir ante un equipo de play off, sobre todo por dar una alegría a una grada que no lo ha pasado bien, ni con la trayectoria del primer equipo ni con la del segundo.

Así las cosas, el filial sevillista, además de conseguir el tercer puesto de forma matemática, tiene ante sí la posibilidad de recortar puntos con el segundo de la tabla, el Murcia, que ayer perdió (2-1) frente al Cartagena, y queda a cuatro puntos de los de Diego Martínez. La segunda plaza sería, sin duda, un premio más que sorprendente para un equipo por el que pocos apostaban a inicio de campaña. La victoria también serviría para cercar al UCAM, nuevo líder en solitario de la categoría, con siete sobre los sevillistas.

Pero paso a paso. De ahí que el primer objetivo sea certificar de forma matemática el tercer puesto. ¿Qué debe ocurrir? Que el Sevilla Atlético vuelva a la capital andaluza con los tres puntos en el zurrón y que el Cádiz no gane al Jumilla; en caso de que esto no ocurra, se deberá esperar una semana más para certificar el tercer puesto.

La convocatoria de cuatro jugadores del filial con el primer equipo por parte de Unai Emery ha hecho que Diego Martínez tire de escalafones inferiores para completar una convocatoria de 19 jugadores -por lo que deberá descartar a uno antes del choque-, marcada, además, por las ausencias de Bernardo Cruz, sancionado, e Ivi, lesionado.