En el Cajasol nadie quiere lanzar las campanas al vuelo, pero desde luego una batalla sí que ganaron en el club cuando el Power Electronics anunció a mediodía la contratación por dos temporadas de Omar Cook, el ex base de Unicaja que jugará en la ciudad levantina durante las dos próximas campañas. Y se frotan las manos en San Pablo porque el vigente campeón de la Eurocup, que se ganó por ello el derecho a competir en la Euroliga, tenía pactado el contrato también por un par de campañas con Earl Calloway. ¿Qué pasó? La ACB aceptó que el Cajasol lo inscribiera en la lista para el derecho de tanteo por su condición de nuevo ciudadano búlgaro y los valencianos decidieron no apostar por el jugador de Atlanta e ir directamente a por otro base también con pasaporte europeo (montenegrino) con más caché, Omar Cook, evitando los líos de presentar una oferta por Calloway, que el Cajasol pueda igualarla y quedarse compuesto y sin director de juego a mediados de agosto.

En principio, el Power Electronics, que ya se hizo con los servicios en junio del serbio Dusko Savanovic, era el único club de la ACB interesado en fichar a Calloway, saliendo beneficiado de la retirada -entre comillas por haber adquirido a un jugador de mayor nivel aún- levantina el Cajasol, puesto que por el momento es el equipo que mejor propuesta le ha hecho a los agentes del base.

Eso sí, en Sevilla andan intranquilos porque hasta que no se decida Calloway, tienen la mosca detrás de la oreja por si aparece algún club extranjero que incremente notablemente la oferta hispalense. De hecho, el Montepaschi y el Armani Jeans, poderoras escuadras italianas, buscan un base titular para sus futuros proyectos y ya se vinculó al base hace pocas semanas al estadounidense con nacionalidad búlgara con el campeón de la Lega.

La continuidad de Calloway sería un respiro para los sevillanos, que podrían utilizar una de las plazas de extraeuropeo para el puesto de escolta (Bullock o el que sea) y la otra para la posición de pívot puro, siendo Paul Davis el preferido por Plaza tras caerse del cartel Richard Hendrix.

Respecto a las otras negociaciones, pocas novedades. El Cajasol sigue en conversaciones con el Manresa para contratar a Kaloyan Ivanov, el ala-pívot búlgaro que según declaró el fin de semana a este periódico se ve con pie y medio en San Pablo. Está de acuerdo Ivanov con los dos años ofrecidos y sólo queda el acuerdo entre clubes. Los barceloneses pedían 100.000 euros y los hispalenses no desembolsarán tal cantidad, incluso puede que ninguna.

El fichaje de Katelynas también va por buen camino. El Meridiano no irá al tanteo y el lituano, que se incorpora el jueves a su selección, está muy cerca, así como Kirksay, que no termina de concretar su renovación por detalles de pejiguera, entienden en el club.