El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, se reafirmará ante el Rey el jueves en su voto contrario a una posible investidura de Mariano Rajoy por responsabilidad hacia sus militantes y al electorado socialista que rechaza facilitar que el PP siga gobernando. "La posición no cambia", sentenciaron fuentes de Ferraz para ratificar la negativa a Rajoy durante la ronda de consultas con Felipe VI, que comienza mañana.

Según el equipo de Sánchez, no han surgido elementos nuevos como para que el PSOE se plantee un cambio de posición, por lo que, "al seguir todo igual", el secretario general será tajante en su audiencia con el Rey. Ferraz considera que Rajoy no necesita al PSOE, puesto que puede asegurarse la investidura con el sí de Ciudadanos y Coalición Canaria y, al menos, la abstención de Convergència y PNV.

Para los socialistas, la abstención en la reelección de Rajoy supondría "perder la confianza" de los militantes y su electorado, por lo que no están dispuestos a asumir ese sacrificio. "Nuestra gente dice que nos ha votado para que gobierne el PSOE, no el PP. Y que si se tiene que ir a unas terceras elecciones, vamos y punto", aseguran desde la Ejecutiva Federal.

La dirección de Sánchez critica que el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, esté favoreciendo la estrategia de Rajoy de "poner contra las cuerdas" al PSOE, escudándose incluso en la figura del Rey. "Nos pide responsabilidad, pero ¿Podemos no es responsable con 71 diputados?", añaden las fuentes para sugerir que los socialistas podrían plantearse una abstención si también lo hace la formación de Pablo Iglesias.

Algunos diputados son de la teoría de que si Rajoy tiene detrás 169 apoyos, "se podrá entender una abstención" para desbloquear la situación, siempre que el PP "se mueva" antes y sume aliados que lo dejen al borde de esa mayoría. La tesis que defiende esta facción es que Sánchez "está esperando a que algunos de los barones críticos pidan la abstención para convocar una consulta a la militancia" para que ésta decida qué hacer, argumenta uno de los diputados que se salen de la línea oficial. A su juicio, hay que dejar gobernar al PP porque "la UE no va a dar tregua a España" en los próximos meses y es preferible que "Rajoy asuma los recortes" que deberán hacerse a partir de septiembre.