El concejal delegado de Fiestas Mayores del Ayuntamiento de Sevilla, Gregorio Serrano, explicó ayer que el balance de la Feria demuestra que ha sido "esplendorosa" y que, gracias a los servicios de Inspección de Consumo y Veterinarios, no ha habido ninguna toxiinfección en el real, si bien se le abrirá un expediente sancionador al proveedor que transportaba 185 kilos de comida en mal estado hacia el recinto ferial.

Se trata de un episodio sobre el que ya se pronunció el portavoz de Facua-Sevilla, Rubén Sánchez, quien reclamó una investigación en profundidad sobre los proveedores alimenticios que fueron sorprendidos cuando trasladaban "comida caducada" con destino a las casetas de distrito. El concejal Gregorio Serrano señaló ayer que el proveedor fue detenido el pasado viernes y que se le intervinieron 185 kilos de alimentos en mal estado o con la fecha de caducidad cumplida, por lo que "se le va a abrir un expediente sancionador".

Gregorio Serrano indicó que, según los datos del servicio de Inspección de Consumo, se han destruido 720 kilos de alimentos y levantado 52 actas de denuncia y, "lo más importante", que no ha habido toxiinfección alimentaria.

El edil subrayó que se han inspeccionado 130 establecimientos, entre casetas, puestos de comida rápida o de dulces; destacando que no ha habido "ni una sola reclamación" a los inspectores de consumo, que están destacados en la caseta de mando de la Policía Local.

"Esto demuestra que los inspectores de consumo y los inspectores veterinarios han hecho su trabajo con la suficiente antelación y han evitado que estos alimentos llegaran a las casetas municipales", aseguró el concejal, que indicó que se han realizado cerca de 230 inspecciones a vehículos diariamente en la entrada a la Feria, con personal de Consumo, Veterinario, Seprona, Guardia Civil y Policía Local.