La Policía Local de Sevilla cerró la Feria de Abril con 57 denuncias por consumo de alcohol en la calle. La cifra de multas es bastante baja, si bien fuentes municipales explicaron a este periódico que la prioridad de la Policía Local nunca ha sido denunciar a las personas que realizan botellonas en la calle, sino disolver estas concentraciones. Por ello, los policías no multaron a los jóvenes que se marchaban de la zona en la que se encontraban, sino sólo a aquellos que se negaban a irse o a entregar las botellas a los funcionarios.

La Feria de Abril de 2015 ha sido quizás la edición en la que más presencia policial contra las botellonas ha habido. Patrullas de este cuerpo recorrieron las calles de la Feria y del barrio de Los Remedios para disolver las botellonas que se celebraban en ellas. Fruto de este trabajo se ha impedido que hubiera macrobotellonas en los puntos donde otros años era común ver a cientos de jóvenes bebiendo alcohol parados en la calle. La portada de la Feria, la contraportada de la misma y algunas calles de Los Remedios eran escenario habitual de estas grandes concentraciones de jóvenes. Para ello se tomaron medidas preventivas, como vallar la calle Virgen de la Antigua.

Todo este dispositivo ha funcionado para impedir las grandes botellonas, pero no tanto para disolver los pequeños grupos de jóvenes. El delegado de Fiestas Mayores, Gregorio Serrano, llegó a admitir públicamente la dificultad de luchar contra este tipo de concentraciones.

El dispositivo de la Policía Local ha consistido en una serie de patrullas por el interior de la Feria y por las calles de Los Remedios. Los policías siempre iban acompañados de los trabajadores de la empresa municipal de limpieza, Lipasam, que iban retirando las bolsas y las botellas a medida que se iban disolviendo las concentraciones de jóvenes. Además, la Policía acudía también a los avisos recibidos por el número de teléfono 092 relacionados con la botellona, que durante la pasada Feria fueron 134. Este número es muy similar al del año pasado, cuando se registraron 137 llamadas, si bien el año pasado todavía no estaba activo el 092 y los avisos entraban a través del teléfono de emergencias de la Junta 112.

Las patrullas contra la botellona han sido posibles gracias a restar policías de otros servicios, como denuncia el Sindicato Profesional de Policías Municipales de España (Sppme) en la última edición de su revista. Según esta organización, la Policía destinó la mayor parte de sus efectivos a escoltar a Lipasam en las tareas de limpieza y restó personal para controlar la venta ambulante en la zona de atracciones, de los bodegones y en el interior del recinto ferial. Además, la revista denuncia que "Zoido facilita la botellona", en referencia a que el Ayuntamiento permitió a determinados comercios vender alcohol a diario hasta las dos de la madrugada, cuando el límite de horario establecido para ello habitualmente es las diez de la noche.