Comienzan los cambios. El IX Sevilla Festival de Cine Europeo (SEFF), que se celebrará del 2 al 10 de noviembre, dejará de tener su principal escaparate en Nervión Plaza para trasladarse al centro. Los cines Alameda, Avenida y Plaza de Armas acogerán en esta edición las principales proyecciones del certamen, que también ha mudado su cuartel general desde el Centro de las Artes de Sevilla (CAS), ubicado en el monasterio de San Clemente, al Teatro Alameda. Precisamente este espacio municipal ubicado en la calle Crédito será otra de las novedades de la programación, pues se incorpora como escenario de eventos y conciertos de una cita que tendrá en las actividades paralelas otra de sus grandes bazas. Varias de esas propuestas complementarias las ha diseñado el festival junto con el Centro de Iniciativas Culturales de la Universidad de Sevilla (Cicus): un intenso programa de conferencias, proyecciones y debates que permitirá estrechar lazos entre estudiantes y profesionales.  

Finalmente, según ha podido saber este medio, no será Rumanía la geografía homenajeada. El nuevo director del SEFF, José Luis Cienfuegos (Avilés, 1964), ha optado para su esperado debut por rendir tributo a dos cinematografías de gran interés y que, como la española, sufren especialmente el impacto de la crisis económica. Así, Grecia y Portugal recibirán el mimo del festival sevillano, lo que supone también una llamada a la solidaridad con dos de las culturas más fértiles de la vieja Europa y cuyo cine de autor goza de una estimulante vitalidad a principios del siglo XXI, como prueban los nombres de Yorgos Lanthimos (Canino, Alps) en el caso heleno, o de Miguel Gomes y, por supuesto, Pedro Costa, en el panorama luso.

Tampoco sería extraño que Cienfuegos aprovechara esta convocatoria para evocar la figura del inolvidable cineasta Theo Angelopoulos, que murió el pasado mes de enero en Atenas atropellado por la motocicleta de un policía cuando buscaba localizaciones para su nuevo proyecto. El célebre director de La mirada de Ulises y La eternidad y un día preparaba una película sobre la crisis griega, según reveló su habitual guionista, el escritor Petros Márkaris, durante su participación en la última Feria del Libro de Sevilla. Se titulaba El otro mar y quedó inconclusa, con apenas 38 minutos filmados. Era el cierre de su segunda trilogía sobre la historia griega del siglo XX y en ella Angelopoulos trataba de comprender y explicar cómo sus compatriotas habían llegado a esta dramática asfixia económica.

Más allá de Grecia y Portugal, el SEFF volverá a estrenar en Sevilla algunos de los títulos más aplaudidos de la última cosecha del cine europeo. Entre esas perlas figura la nueva película de Michael Haneke, Amour, Palma de Oro del último Festival de Cannes. Además, está previsto un ciclo dedicado a la cineasta Agnès Varda, coincidiendo con su exposición en el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo, y que contará con su presencia. La emblemática directora de la Nouvelle Vague va a mostrar en el Monasterio de la Cartuja (del 25 de octubre al 10 de febrero de 2013) una serie de obras en la que reflexiona sobre la presencia de las playas en su vida y su imaginario.

Como ya se anunciara, a las habituales secciones competitivas (la Oficial, la selección EFA, EuroDoc y Eurimages) se suman ahora dos de reciente creación: Las Nuevas Olas, complementaria a la Competición Oficial y destinada a nuevos valores y miradas en el cine europeo contemporáneo, y Europa Junior, dirigida al público infantil y juvenil. En ambos casos, concurrirán largometrajes de factura mayoritariamente europea, producidos después del 1 de enero de 2011, con carácter inédito en España en cuanto a su exhibición comercial y no proyectados en otros festivales en territorio español.

Con 950.000 euros de presupuesto, y los cinéfilos de la ciudad verdaderamente ansiosos por hacer suyo este festival, su director José Luis Cienfuegos se plantea "el reto desafiante" de, en plena crisis económica, "ofrecer un certamen cinematográfico con un programa riguroso, solvente, educativo; un programa que motive el deseo de ver más cine y explorar la cinematografía europea, tan potente creativamente y a la vez tan necesitada de una continua reivindicación ante el público en general", según defiende en la Carta de Presentación que ha publicado en la web oficial de la muestra.