"Cuando bailo siento que soy libre. Estoy muy a gusto, me siento bien". La sensación de bienestar que la danza le reporta a Carlota, de 8 años, no la cambiaría por nada, por ningún chapuzón ni juego en la piscina. Esta pequeña aspirante a bailarina pasará las mañanas de los primeros quince días de julio en un salón de baile, aprendiendo nuevas formas de expresión corporal al ritmo lúdico que marcan los tiempos del taller estival del Centro Andaluz de Danza (CAD), con sede en Sevilla. Será una forma de continuar con la formación en esta disciplina, que ya inició este pasado curso en el programa Danz-a-Ficción, impartido en este mismo espacio.

Por segundo año consecutivo, el CAD ha puesto en marcha sus talleres Ven a jugar a la danza (que hoy se inician), dirigidos a niñas y niños de entre 6 y 12 años. Según Juana Sánchez, coordinadora de la Unidad de Artes Escénicas y Musicales del CAD, C "este programa tiene como principal objetivo acercar la danza a los ciudadanos y crear nuevos públicos; algo que hemos logrado dada la demanda y el interés que esta disciplina ha despertado entre los padres, que confiesan que ahora son más asiduos a los espectáculos".

Paralelamente, y por primera vez, el CAD ha organizado el Taller intermedio de Danza Contemporánea y Neoclásica para niveles más avanzados, donde dará cobertura a las aspiraciones formativas de jóvenes bailarines. Aprendizaje al natural. Todos los alumnos y alumnas del taller infantil recibirán clases de neoclásica, contemporánea y de flamenco, a través de una metodología de enfoque lúdico. Cristina Gallardo, bailaora profesional y licenciada en Dramaturgia e Interpretación, es una de las profesoras del programa, explica la mecánica de las clases. "El aprendizaje se transmite a través del juego, aunque nunca dejando a un lado la disciplina y los objetivos formativos". 

El taller, básicamente, mezcla la expresión corporal con el teatro y el ritmo, enriqueciendo al niño desde el entretenimiento. De este modo, los niños y niñas aprenden a bailar sin apenas darse cuenta, de una manera natural". Las jornadas combinan las clases de baile con otras actividades complementarias relacionadas con el mundo artístico y el escenario.

Así, los contenidos de este curso de danza se enriquecen con sesiones de maquillaje, peinados, percusión, máscaras e interpretación, combinado con otros elementos, como las marionetas, los disfraces. "Todo ello destinado a fomentar la creatividad, la imaginación y el universo individual de cada niño o niña en un ambiente distendido, propio de esta época estival o vacacional", aclara Cristina Gallardo. Al finalizar cada taller, los pequeños tendrán que demostrar lo aprendido interpretando una coreografía ante sus familiares. "Esta exhibición es una motivación más, que despierta interés y expectativas desde el principio", asegura la profesora.

En su vertiente de taller de verano, el del CAD también incluye otros servicios complementarios, como aula matinal, servicio de guardería y comedor. "Este un programa pensado para niños y niñas con interés en el baile cuyos padres y madres trabajan. Los alumnos pueden estar aquí desde las ocho de la mañana hasta las cuatro de la tarde", avanza Juana Sánchez. El taller infantil de Danza se imparte en dos periodos: del 1 al 12 de julio y del 15 al 26 de julio, de lunes a viernes, en horario de 9:00 a 14:00 -con posibilidad de ampliación hasta las 15:00 para asistir al comedor, y de 8:00 a 9:00, para acogerse al aula matinal, donde los niños están acompañados por un monitor-. El curso intermedio tiene lugar en los mismos periodos, con una duración de 20 horas semanales, distribuidas de lunes a viernes en horario de 10:00 a 14:00. Las clases se imparten en Sevilla, en las instalaciones del Centro Andaluz de Danza (puerta A del Estadio de la Cartuja).