Un mapa humano de emociones sevillanas, así se podría definir la nueva novela de Salvador Navarro No te supe perder. En esta obra coral se cruzan los caminos y se rompen las fronteras entre unos personajes oscuros, perdidos, unidos por el maltrato y el desarraigo emocional."Quería reflejar hasta qué punto una persona se siente totalmente dependiente de otra, en ese limbo donde no puede dejarla escapar. Relaciones perversas que nacieron con una intención sana", comenta el escritor sevillano.

Su cuarta novela se ambienta en una Sevilla moderna, bohemia y cosmopolita, entre los años 2006 y 2008, donde una psicóloga ama de casa abnegada, su familia, un muchacho que padece un gran trauma personal y un grupo de teatro en ciernes dibujan un entramado de relaciones personales complejas que Navarro reconduce hacia la ternura y el desgarro. "Me marqué como objetivo hacer una novela coral a toda costa. Lo elegí así en un principio para tener muchos prismas, no sólo para poder tratar el tema del maltrato, sino también para abordar relaciones emocionales secundarias que me parecían fundamentales en la trama". Este recurso ha permitido al escritor ahondar con profundidad en los personajes y arriesgarse a plantear cuestiones como la concepción de la historia desde el punto de vista del propio maltratador o estudiar las relaciones íntimas tras el duro cristal de frialdad social. "Una de las claves de la escritura es conocer a tus personajes mucho mejor que el propio lector, ahí reside la esencia de un personaje complejo. Soy muy meticuloso a la hora de crear los caracteres".

En una novela con tintes de historia negra -"perversa" la define su autor- parece que los personajes no encuentran reflejo en la persona que los creó. "Quien lee y me conoce, no me reconoce. Mi vida es relativamente luminosa, soy una persona muy sensible, no soy nada frívolo, aunque haya conocido experiencias cercanas al maltrato". Ese toque de "perversión" viene dado por un narrador omnisciente que se enfunda en la piel de cada personaje conociendo sus pensamientos, sentimientos y emociones, contagiando el texto. "Con esto persigo que el lector no confíe tanto en el narrador, exploro la incomunicación, la sensación de que conoces poco a la persona que tienes delante".

Este escritor sevillano, que se confiesa amante incuestionable de Paul Auster y Murakami, ya prepara su siguiente novela, centrada en la muerte y el amor, siempre con un objetivo. "Cuando escribo quiero profundizar en temas fundamentales y de eso tratan mis novelas: de la busqueda de la estabilidad emocional, el anhelo de los personajes de encontrar su lugar en el mundo".

No te supe perder se presenta en la FNAC de Sevilla el día 22 a las 2O:00.