EL panorama económico es agobiante pero se abusa de la generalización y del pesimismo. En Sevilla hay más dinamismo empresarial del que perciben y glosan los presuntos cronistas oficiales. Aquí y en todo el mundo se vive un cambio de era que da la puntilla a empresas que fueron rentables en épocas anteriores, y en la que incrementan su importancia sectores como el aeronáutico, el energético y el digital, a los que la crisis no está paralizando su auge en facturación y en creación de empleos. Hay que subrayar como se merece la envergadura de la feria empresarial aeronáutica que hoy concluye, el Aerospace & Defense Meeting, con actividad en Aerópolis y en Fibes. Un verdadero certamen internacional de negocios, que ha montado, con apoyo de la Consejería de Innovación, la compañía francesa BCI Aerospace, especializada en crear eventos similares de la industria aeronáutica en ciudades de varios continentes. Y digo verdadero porque no admite comparación con otras ferias o convenciones de andar por casa que se inventaban antes para llenar el calendario de Fibes y que sólo servían para darse abrazos.

Menos evidente que la aeronáutica, pero igualmente importante, es la ebullición de nuevas y pequeñas empresas sevillanas en el magma de la economía digital. Cada vez hay más actividades de formación, debate de ideas y desarrollo de proyectos empresariales directamente creadas con comercio electrónico, redes sociales y aplicaciones para móviles. Hoy tiene lugar en el Edificio CREA el Encuentro Impulsando Pymes. Y en el Hotel NH Convenciones arranca hoy el Congreso de Empresa 2.0 y Social Business. Mañana, la Facultad de Finanzas acoge un foro de inversores de ámbito nacional para captar empresas de base tecnológica cuya idea matriz sea de especial brillantez. La próxima semana se celebrará en La Rinconada una destacada convención con las principales empresas multinacionales que dominan internet. Y no son los únicos actos ligados a estos temas en la agenda sevillana. Es cierto que resulta indispensable separar la paja del grano, al vendedor de humo del emprendedor sólido. Pero lo importante es la clara tendencia a pensar las empresas, la generación de bienes y la prestación de servicios desde y para los internautas. Desde Sevilla y para una clientela sin fronteras. Unos triunfarán y otros tirarán la toalla, pero ese es el camino que marcará nuestro futuro colectivo.