TIEMPO El tiempo en Sevilla pega un giro radical y vuelve a traer lluvias

AL terminar la mañana, cuando aún el sol no haya comenzado su declive, cientos de corazones iniciarán su andadura para encontrarse con la ciudad. No se trata de abandonar el barrio, sino de que el barrio se individualiza, se redescubre, se reafirma en este salir de sí mismo para hacerse presente en el centro de la ciudad.

Por eso hoy la ciudad comienza a desgajarse, a arrancarse una a una todas sus collaciones para inundar con el jugo de la historia y de la fe todo el entramado donde viven los hombres. Por eso existe la Semana Santa, para recordarnos que el tiempo y el espacio son sólo realidades tanto en cuanto participan de otros espacios y otros tiempos que construyeron otros hombres y mujeres antes que nosotros.

Sí, el Lunes Santo es el día de los caminos, no tanto de estos largos caminos de asfalto o adoquines, que un día fueron la referencia de la cofradía más alejada de la Carrera Oficial, sino de aquellos otros caminos que supieron iniciar tantos cofrades al vislumbrar cambios que pasarían a la historia o al atreverse a comenzar la aventura de parir una hermandad; cuando nada sobraba, cuando todo estaba por hacer, sin medios y con una formación muy limitada, sólo con la fe como reclamo y el trabajo como herramienta, así fue bordándose bajo el azul oscuro del cielo atardecido este Lunes Santo que disfrutamos.

Hoy que parecen aterrarnos los cambios; hoy que permanecemos atados a días, minutos y hasta calles que consideramos de nuestro uso exclusivo; hoy que el simple gobierno diario de la hermandad parece ser un complejo entramado de alianzas y acuerdos, de actos interminables que nos agotan; hoy, precisamente hoy, Lunes Santo, sería conveniente mirar hacia atrás para reparar en la fuerza y vitalidad de aquellos que se atrevieron a cambiar lo establecido, de aquellos que tuvieron el valor de iniciar los caminos que nos han traído hasta este Lunes Santo de amalgama, de equilibrio, de belleza, de seriedad, de clasicismo, de centro y de barrio, de día y de noche, de ayer y de hoy.

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