Si todos tenemos uno, ¿cuál es la razón por la que el culo, sobre todo el femenino, se convierte en uno de los mayores objetos del deseo? No hay nada más universal. Todos tenemos trasero al igual que pies, manos o brazos, pero él no tiene rival. Una visión fetichista, sí, pero con una base científica que se remonta a la prehistoria. Por instinto natural la postura cuadrúpeda era básica para la reproducción y conservación de la especie. La comunicación a través de los olores de esta zona tan íntima de nuestro cuerpo era además clave, aunque ahora esto nos parezca un tanto repulsivo. El paso a la posición bípeda cambió un poco este concepto pero no del todo. De una forma casi automática e innata la naturaleza hace una llamada cuando un hombre entiende que una mujer tiene un buen cobijo para futuros bebés, aunque esta idea ni se les pase por la cabeza y piensen que se trata de un instinto únicamente sexual cuando giran su cabeza para hacer un bicheo de arriba a abajo y de delante hacia atrás. Somos más complejos de lo que parece. Y aquí las mujeres con los glúteos respingones tienen mucho que decir.

El poder de seducción de una buena retaguardia no tiene rival. Los culos están de moda. Y cuanto más grande mejor. A todos nos gustan que nuestras posaderas sean respingonas, firmes y tonificadas, por eso choca que mientras la mayoría de los mortales trabajan duro para perder volumen, la nueva moda de las famosas sea engrosar sus nalgas hasta proporciones inimaginables. Eso sí, sin perder de vista a la firmeza y la -excesiva- redondez.

Sin importarles la voluptuosidad de sus atributos, Kim Kardashian se siente feliz con su gigantesca retaguardia. La socialité se inyecta la grasa que se extrae de sus piernas para hacer aún más sensual (y sobresaliente, sobre todo esto) toda la zona de allá donde la espalda pierde su nombre. Esto está haciendo que su cuerpo pase a estar un poco descompensado pero Kim está encantada y sus últimas portadas dan buena cuenta de ello. Su hermana Khloe está siguiendo sus pasos, y es que ya se sabe que en todas las familias hay una trendsetter. Más vale que no compartan fila de asientos en la mesa de Navidad... Y que nunca coincidan en el bus con Nicki Minaj o Nicole 'Coco' Austin.

Hay otras celebrities que apuestan por culete respingón pero simétrico y acorde a su cuerpo. Sofía Vergara o Beyoncé son ejemplos de esto. La actriz latina y la cantante son dos de las mujeres más deseadas del mundo y sus voluptuosas curvas tienen mucho que ver en ello. No obstante, no creen que tener un pompis del tamaño de la colina de Hollywood sea la opción más correcta. Ellas apuestan por un trasero tipo Jennifer López, la poseedora de los glúteos más deseados del mundo. Ninguna jovencita arrebata a JLo la hegemonía del culo más deseado y sexy del mundo. Por algo está valorado en más de cinco millones de dólares. La cantante quiere dejar claro que nadie rivaliza con ella en lo que a nalgas se refiere y por eso ha protagonizado un videoclip con uno de los culos -perdón, de las artistas- del momento: Iggy Azalea. La temática del vídeo, que se llama Booty, trata, claro está, de nalgas.

Y es que ya no se va de cara por el mundo, es mejor ir de espaldas. O, mejor dicho, ¡de pompis!