Los dos jóvenes que sufrieron un accidente con sus motos acuáticas el pasado domingo en el pantano Torre del Águila, en el término del Palmar de Troya, no tenían títulos náuticos ni la preceptiva autorización de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir para navegar por este embalse. En el accidente, ocurrido la tarde del domingo, chocaron las dos motos y murió el piloto de una de ellas, un hombre de 30 años identificado como F. C. M., vecino de Utrera.

Según informaron a este periódico fuentes judiciales, la colisión se produjo por alcance entre las dos motos, posiblemente porque una de ellas no guardó la distancia de seguridad de 50 metros que prevé la normativa. Una de las motos podría haberse calado y al conductor de la otra no le dio tiempo a esquivarla. Las mismas fuentes expusieron que ni la víctima ni el otro motorista poseen el título náutico adecuado para manejar esta embarcación. Ninguno de los dos tenía tampoco permiso de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir para navegar por el pantano.

Sólo una de las motos, la de la víctima, tenía seguro de responsabilidad civil, mientras que la otra carecía del mismo. El fallecido llevaba puesto el chaleco salvavidas en el momento del accidente. El siniestro se produjo pasadas las cinco de la tarde. El accidentado fue atendido por el servicio de emergencias del 061, que desplazó un helicóptero al lugar de los hechos, pero los médicos no pudieron hacer nada por salvarle la vida.

El cadáver se levantó a las ocho menos cuarto, después de que el médico forense de guardia examinara el cuerpo y ordenara el levantamiento. El cadáver fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Sevilla, donde se le practicó la autopsia. Las embarcaciones fueron trasladadas al depósito de vehículos del Ayuntamiento de Utrera. El equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de este municipio se ha hecho cargo de la investigación del suceso.