Dos jóvenes han sido detenidos y otro imputado por la Guardia Civil en la llamada Operación Algazul acusados de diversos robos en una urbanización de Almensilla, en la que ellos mismos residían.

Los tres jóvenes, que vivían en la misma urbanización donde se producían los hurtos, se escondían en sus viviendas con los efectos robados, según la nota de prensa de la Guardia Civil, en el que se añade que al menos hasta en cinco ocasiones entraron por la fuerza en las viviendas vecinas incluso con sus moradores en el interior. Estos robos han tenido en constante tensión y angustia a los vecinos de esta urbanización, la mayoría familias con niños pequeños, pues no había sido posible identificar a los ladrones hasta el último de los robos, explican las fuentes. En el último hurto acontecido en dicha urbanización, entraron rompiendo con una cizalla los barrotes de una ventana y mientras uno registraba el dormitorio, la dueña de la vivienda se despertó por el ruido y horrorizada gritó, algo que propició la huida del ladrón por el tejado del trastero situado en el jardín. Gracias a la descripción facilitada por la víctima, la Guardia Civil de Mairena del Aljarafe investigó y localizó a un joven, quien se reconoce autor del robo tras el interrogatorio.

La Guardia Civil continuó sus investigaciones y supo que los autores son tres jóvenes, implicados en éste y otros robos en la misma urbanización. Actuaban rápido, entraban en las viviendas y sustraían todos los efectos que encontraban de valor y que se pudiese transportar fácilmente, como dinero, joyas y material electrónico. Al vivir estos jóvenes en la misma zona que robaban, se marchaban rápidamente a sus casas y dificultaban así ser descubiertos.

Finalmente la Guardia Civil localizó al resto del grupo y detuvo a dos jóvenes, -C.G.O, D.C.V.H- e imputó a un tercero -L.D.M.Q-, todos de 22 años, como presuntos autores de los cinco robos.