El nuevo gobierno local socialista de Sanlúcar la Mayor tiene previsto iniciar en 2016 las obras para adaptar la residencia de ancianos de San Eustaquio -cien por cien municipal, aunque tiene algunas plazas concertadas con la Diputación- a los requisitos que marca la ley, en una intervención que durará casi un año, durante el cual los mayores serán realojados en centros de la localidad, con los que se llegará a acuerdos. Preferiblemente, se intentará que todos vayan al mismo sitio.

Así lo ha avanzado el alcalde, Raúl Castilla, quien precisa que, antes de dar el paso, han mantenido reuniones con la Junta, la Diputación y la Agencia de Políticas Sociales y Dependencia, del Gobierno central, porque con la nueva Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local la inversión en este centro va a tener reparos de la Intervención al ser una competencia "impropia", es decir, que por esa ley no correspondería al Ayuntamiento y se pretenden en evitar mayores problemas legales en ese sentido. Pero Castilla subrayó que el gobierno, como toda la Corporación, está convencido de la necesidad de hacer todo lo posible por mantener el centro abierto, en las mejores condiciones, y que ésta ha sido unas de sus prioridades. "El peligro de cierre de la residencia se ha esfumado por completo", insiste.

La residencia tiene una acreditación provisional desde el año 2011. "La Junta ha sido muy flexible y permisiva", admite el regidor, y recuerda que la Administración andaluza ha hecho muchas advertencias en los últimos cuatro años, que no se atendieron. Para lograr la acreditación definitiva -lo que posibilitaría también concertar plazas con la Junta, algo que por la actual situación del centro no es posible- hay que hacer una amplia reforma, con una inversión de unos 450.000 euros.

El proyecto está terminado y hay que aprobar el calendario de ejecución. En principio, se prevé que las obras se inicien en la primera mitad de 2016, con un plazo de ejecución de diez meses, con lo que la reforma podría culminar a lo largo de 2017. Aunque el Ayuntamiento sigue buscando "fórmulas de financiación", incluirá ya fondos propios en el presupuesto de 2016, que se debe aprobar ahora.

Porque el edil insiste en que el mayor problema que tienen no es tanto económico como la propia ley de Reforma Local. Según ésta, los servicios de atención primaria de salud, educación y servicios sociales, como la residencia, deberían haber pasado a la Comunidad Autónoma y, aunque recientemente se ha supeditado su aplicación a un proceso de ordenación de competencias en el marco del nuevo sistema de financiación autonómica y local, los interventores siguen levantado reparos. También ocurrirá con la obra del asilo y de ahí que se haya buscado el beneplácito del resto de administraciones.

El alcalde explica que también debido a la reforma local lo más probable es que la Diputación no pueda mantener en 2016 el concierto de plazas, con lo que esa vía de financiación se perderá. El Ayuntamiento asumirá la diferencia, hasta que, una vez adaptado el centro y con la acreditación definitiva de la Junta, sea posible intentar el concierto de plazas con esta administración.

"En cuatro meses hemos hecho más por este asunto que en estos años, tenemos el proyecto y vamos priorizar las obras", subrayó el edil socialista, quien lamentó el "uso político por parte de algunos grupos de la oposición, concretamente, por el Grupo Independiente Sanluqueño, de este problema", al haber "afirmado públicamente que se va a cerrar, cuando sabe que es absolutamente falso". Para el edil, lo peor es que se ha creado "un estrés innecesario a los mayores, que lo viven de manera muy penosa".