Provincia

Hallan un lince muerto en la Dehesa de Abajo

  • Ecologistas denuncian que la comarca de Doñana carece de las condiciones para garantizar la supervivencia de la especie

La organización Ecologistas en Acción apuntó ayer a que el cadáver de lince ibérico localizado en la Dehesa de Abajo, en el término municipal de Puebla del Río, en la comarca de Doñana, podría pertenecer a Salado, ejemplar desaparecido hace dos años durante una cacería. Según indicó a Europa Press el portavoz de Ecologistas en Acción en Huelva, Juan Romero, los restos del animal, que se encontraba en avanzado estado de descomposición, se han hallado en una reserva natural concertada con el Ayuntamiento de Puebla del Río, en una zona aledaña a los Pinares de Aznalcázar, lugar donde hace dos veranos desapareció el ejemplar.

Romero señaló que a pesar del tiempo transcurrido desde su desaparición no se tenía noticia de su paradero", por lo que insistió en la posibilidad de que los restos hallados ayer correspondan a este ejemplar, aunque manifestó que habrá que esperar los resultados de la necropsia para confirmarlo. Criticó que aún no se hayan dado a conocer las causas de la muerte de Estepa, hallada muerte el pasado 1 de febrero en la comarca de Doñana y apuntó a una posible "manipulación" del cadáver. Según explicó, a pesar de que en un primer momento se apuntó a que el animal pudo morir por atropello al encontrarse su cadáver cerca de un camino rural asfaltado en el término municipal de Villamanrique de la Condesa, éste "no presentaba lesiones por golpes", por lo que "pudo fallecer por envenenamiento".

Romero afirmó que Doñana "no reúne las condiciones necesarias para garantizar la supervivencia del lince ibérico en estado salvaje" debido a la ausencia de conejos, presa básica del lince, la fragmentación del territorio causada, entre otra razones, por la multiplicación de carreteras, y la "excesiva" presencia de cepos y artes ilegales de caza. Este hecho viene corroborado, según el ecologista, en el caso del lince Caribú, el cual se encuentra en estos momentos al borde de la alambrada de Matalascañas (Huelva) queriendo salir de nuevo de Doñana tras haber sido capturado en Portugal. Por ello, apostó por la búsqueda de nuevos espacios naturales para reintroducir a este felino en peligro crítico de extinción que dispongan de un buen estado de conservación y conejos en abundancia y que no tenga "tantos problemas como Doñana".

Incidió en que una de las "pocas posibilidades que tiene el lince ibérico para sobrevivir" es que se conecte a Doñana con Sierra Morena a través de corredores ecológicos", algo de lo que, dijo, "no parece enterarse la Consejería de Medio Ambiente", a lo que hay que unir, en su opinión, una "fuerte" campaña de concienciación social. Pidió que se investiguen las causas por las que la mayoría de los linces ibéricos que están siendo criados en cautividad tienen problemas renales, lo que "compromete ese seguro de vida en le que se había convertido este programa".

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