Ganó el Betis, pese a Gustavo Poyet, y con el meta de Osasuna Nauzet como protagonista, pero el encuentro en El Sadar tuvo un curioso e interesante frente a frente entre dos jugadores que tienen en común la elástica verdiblanca, Tonny Sanabria y Sergio León, sin olvidar el debate que generó la suplencia de Rubén Castro. Nada más conocer la alineación del uruguayo y ver al canario en el banquillo, las reacciones de los béticos no se hicieron esperar, pues ya no era el hecho de que el goleador heliopolitano no jugara en la banda, sino que ni siquiera estuvo entre los once titulares.

Rubén Castro entró en el minuto 83 de partido y en ese momento salió del mismo Sanabria. El paraguayo volvió después de haber jugado los dos primeros partidos, ante Barcelona y Deportivo, y jugó arriba como hombre más adelantado, como era la idea de Poyet en verano, y el atacante procedente de la Roma fue de menos a más. En la primera parte pasó casi desapercibido, pues el Betis no creó ocasiones, sólo tuvo la del gol y la aprovechó, mientras que en la segunda sí apareció más.

Sí estuvo más participativo Sergio León, Pichichi de Segunda la temporada pasada en el Elche y con el conjunto verdiblanco en la mente, este pasado verano, por si aparecía la opción de volver a Heliópolis. Hubiese sido el regreso a casa del de Palma del Río, canterano bético que llegó a debutar en el primer equipo de la mano de Víctor Fernández, en 2010, en un partido contra el Girona en el Benito Villamarín. Sin embargo, el atacante tuvo que ganarse la vida lejos de Heliópolis hasta llegar a Primera División de la mano de Osasuna, donde es todo un baluarte. De hecho, gozó en la primera mitad de una oportunidad que él mismo se fabricó, aprovechando un error de Pezzella, y que culminó con un zapatazo con la izquierda que se fue fuera cerca del poste.

En el segundo acto, Sergio León entró más en juego y dejó detalles de calidad, como un túnel a Pezzella y un recorte posterior para encarar el área, apareciendo también la figura de Sanabria. El delantero bético estuvo cerca de marcar en un disparo con la izquierda que Oier sacó en la misma línea, y después enganchó un centro de Álex Martínez, saltando entre los dos centrales, pero el balón se fue desviado.

Éste fue el bagaje del delantero bético, que dejó su puesto, junto con Joaquín, a Álex Alegría y Rubén Castro, cuya suplencia fue incomprensible, pues la imagen del Betis no mejoró y la mano de Poyet siguió sin verse pese a la victoria en El Sadar. Y si Rubén lleva varios partidos sin ver portería y apareciendo poco es por la decisión del entrenador del Betis de hacerlo jugar en la izquierda, pues desde Mestalla, el artillero verdiblanco no marca y eso coincide con su cambio de posición.

Y tampoco acabó el partido Sergio León. El atacante de Osasuna, futbolista de barrio, de los que aprende a jugar en la calle y que tiene como referente a Villa, fue cambiado en el minuto 88 por Fausto Tienza, otro jugador con pasado bético, al quedarse su equipo con diez, y recibió los aplausos de su público. Así finalizó el frente a frente entre Sanabria y Sergio León, con Rubén siempre muy presente. Si su suplencia no se entendió, todavía menos el hecho de que ¡en el 83! entrara al campo.