"Entró en el quirófano y al poco tiempo salieron los doctores Pedrote y Santos para explicarnos que la operación era muy arriesgada. Se había complicado. Fue un momento muy duro. Decidimos confiar. Dejamos a nuestro hijo en sus manos". Antonio López y Pepi Camacho, una pareja de Pino Montano, recuerdan con claridad una de las esperas más angustiosas que han vivido en el Hospital Virgen del Rocío. Su pequeño Israel, de 5 años, se sometía a una intervención quirúrgica de riesgo vital para luchar contra un grave problema de corazón que le provocaba continuas taquicardias y que podía tener un desenlace fatal si no se encontraba un remedio. La opción era una operación que no se había hecho nunca en Sevilla y en cirugía apenas está descrita en dos ocasiones en el mundo.

Un mes después de esos angustiosos momentos, los padres de Israel quieren agradecer a los especialistas que han tratado a Israel el "éxito" de su trabajo en quirófano en esta compleja intervención. Desde entonces, Israel no ha vuelto a sufrir taquicardias y su calidad de vida, así como la de su familia, ha mejorado enormemente. "Tenía que acudir todas las semanas al 061, de día y de noche, por las arritmias que sufría mi hijo", explica la madre. La operación se realizó el 14 de diciembre de 2011 y fue la tercera vez que Israel entró en quirófano para una intervención en el corazón.

El pequeño nació con un solo ventrículo, una cardiopatía congénita llamada atresia tricúspide, que afecta a cinco de 100.000 recién nacidos. A los 2 años Israel se sometió a la primera intervención quirúrgica y en febrero de 2011, de nuevo, entró en quirófano en el Hospital Virgen del Rocío. "Se sometió a la técnica de Fontan. Este procedimiento consiste en conectar la vena cava al tronco pulmonar. Al carecer de un ventrículo, la sangre de Israel no llegaba a oxigenarse, de modo que a través de esta operación el objetivo es que la sangre venosa no entre en el corazón, sino que conecte directamente con los pulmones para así cargarse de oxígeno", explica el padre de Israel.

La operación resultó un éxito, pero las arritmias continuaron y cada vez eran más frecuentes. Le subieron la dosis de medicación, pero los fármacos no frenaron las palpitaciones. Estas crisis en los latidos mermaba cada vez más la calidad de vida de Israel y de su familia. Sus padres buscaron soluciones y los especialistas se la ofrecieron, pero era arriesgada. "Para impedir la taquicardia la opción es eliminar en el corazón, a través de una sonda de radiofrecuencia, el foco de los cortocircuitos que generan ese movimiento anormal" del órgano vital, explica José Santos, jefe de la Unidad de Cardiología Pediátrica en el Hospital Virgen del Rocío.

El problema residía en que "no podíamos llegar hasta el corazón a través de la vena cava, porque estaba conectada a los pulmones, de modo que teníamos que utilizar otros conductos para alcanzar la zona enferma a través de stent, concretamente la arteria aorta y el esófago, lo que complicaba la intervención", añade el especialista. En el quirófano, el doctor José Santos, acompañado por los doctores Alonso Pedrote, jefe de la Unidad de Arritmias y Electrofisiología, y Eduardo Arana, escribió una página más de la historia de la Medicina en el Virgen del Rocío y dieron una nueva oportunidad a este niño.

La cardiopatía congénita de Israel forma parte de un amplio abanico de lesiones en el corazón que afectan cada año a unos 700 recién nacidos en Andalucía. Estas malformaciones en el músculo cardiaco comienzan en la gestación y son la primera causa de muerte súbita en jóvenes cuando no se tratan a tiempo. En Andalucía Occidental, el Hospital Virgen del Rocío es centro de referencia para abordar estos problemas en niños y con frecuencia requieren intervenciones quirúrgicas y estancias largas en el hospital. Para estas familias, la asociación de padres afectados Corazón y Vida cuenta con una vivienda a pocos pasos del Hospital Infantil, ya que, según explica Eduardo Morales, gerente de esta asociación, muchas familias no pueden pagar un hotel -el complejo Virgen del Rocío cuenta con un hotel con precios especiales para familiares- durante estos periodos de hospitalización. Además, esta asociación sin ánimo de lucro cuenta en el Hospital Infantil con una psicóloga, Almudena Lloret, que atiende a los familiares durante un proceso que suele ser muy doloroso para los padres y para los niños.