Las manifestaciones de desagrado por la política en materia universitaria impulsada por el ministro de Educación, José Ignacio Wert, siguen creciendo. Este lunes le tocó su turno a la mesa del Claustro de la Universidad de Sevilla, que en un duro comunicado reclamó al gobierno de España la retirada del Real Decreto Ley 14/2012 del pasado 20 de abril, en el que se toman una serie de medidas urgentes para la racionalización del gasto público en el ámbito educativo.

La mesa del Claustro, presidida por el propio rector de la Hispalense, Antonio Ramírez de Arellano, una de las voces que se han opuesto con más firmeza a este decreto ley, le solicita al Gobierno encabezado Mariano Rajoy (PP) que "afronte en lo sucesivo las reformas que afecten al sistema universitario desde el diálogo con los representantes de todos los intereses implicados" para así poder alcanzar el "más amplio consenso académico, político y social". Asimismo, insta a la Junta de Andalucía a que asuma de "forma inequívoca" una financiación pública "suficiente del Sistema Andaluz Universitario y una política de tasas y becas que garantice la igualdad de oportunidades y la equidad".

De esta forma, la Universidad de Sevilla da una vuelta de tuerca más en su enfrentamiento con el Gobierno de la nación y muestra su "rechazo al incremento desproporcionado de las tasas" universitarias, lo que, a su entender, "va a dificultar el acceso y la permanencia en la Universidad del alumnado más vulnerable económicamente". La Mesa del Claustro llega a hablar de los estudiantes más perjudicados corren el riesgo de la "exclusión social". La Mesa del Claustro muestra, asimismo, su preocupación por el futuro los estudiantes extracomunitarios. Avisa que se puede poner en riesgo "las políticas de cooperación con las regiones del planeta más desfavorecidas".

Por supuesto, también hay espacio en el comunicado para cuestiones relacionadas con las condiciones laborales del profesorado, dejando claro que "los sexenios, tal como están, resultan un indicador de eficacia desigual debido a la heterogeneidad del mundo de la investigación". En este sentido hay que recordar que el Gobierno ha establecido que los profesores que no acrediten sexenios (seis años de investigación de calidad) tendrán que asumir una mayor carga docente. Es decir, la Mesa del Claustro no ve objetivo y realista el indicador que ha buscado el Gobierno para cuantificar el rendimiento de los profesores.

La Mesa del Claustro ha convocado, precisamente, una reunión plenaria para el próximo día 21 de mayo, un día antes de la huelga general universitaria convocada en todos lo sectores de la educación universitaria: profesores, estudiantes y personal de administración y servicios. Sin duda será una jornada caliente en la que se debatirá largamente sobre las medidas del gobierno.

Actualmente, la Mesa del Claustro de la Universidad de Sevilla está compuesta por siete personas: el rector, la secretaria general de la Hispalense, Concepción Horgué, y los profesores Juan Jiménez-Castellanos (Medicina), Rocío Sánchez Lissen (Ciencias Económicas y Empresariales), Jaime Benjumea Mondéjar (Ingeniería Informática), Josefa Álvarez Fuentes (Farmacia). Por parte del personal de administración y servios está presente Arístides Muñoz Villar. Las dos sillas reservadas para los estudiantes están todavía vacantes.