El concejal de Turismo y Fiestas Mayores de Sevilla, Gregorio Serrano, pidió ayer disculpas al edil cordobés Ricardo Rojas por la "indebida" inclusión por parte del Ayuntamiento de la capital andaluza y los hosteleros hispalenses del salmorejo como plato típico sevillano en un concurso gastronómico que pretende seleccionar la tapa más característica de la cultura culinaria de la capital andaluza. El Consistorio hispalense explicó que ha "dado instrucciones de retirar el salmorejo del proyecto Patrimonio Gastronómico de Sevilla en vista del lamentable malentendido suscitado". Ricardo Rojas, que a su vez es embajador del salmorejo, agradeció de parte de los cordobeses "la forma de proceder desde Sevilla y que todo esto haya terminado bien". La rectificación por parte de Sevilla coincidió ayer con la presentación de un estudio acerca de la receta cordobesa por excelencia y de cuál es la imagen que se tiene de este plato en el exterior.

La polémica se desató cuando Ayuntamiento de Sevilla incluyó el salmorejo dentro de la lista de las 18 tapas candidatas a representar el patrimonio gastronómico hispalense, tal como lo define la iniciativa puesta en marcha por la Delegación de Turismo que dirige Gregorio Serrano. Desde que en la provincia vecina se tuvo constancia de dicha inclusión las redes sociales han ardido acusando a los sevillanos de apropiarse de este plato, pese a que ya se ha convertido en un referente gastronómico de toda Andalucía. A tal grado han llegado las críticas que la patronal de hostelería de Sevilla ha salido al paso para aclarar el motivo por el cual el salmorejo se presenta en dicho catálogo. Según el comunicado enviado por los representantes del sector, el proyecto Patrimonio Gastronómico de Sevilla propone aquellas tapas que "originadas o no en esta ciudad son de consumo habitual en ella". Se insiste en que "no se reclama la sevillanidad de ninguna de las tapas", sino de realzar la gastronomía andaluza.

Con toda esta polémica los cordobeses han hecho propio un eslogan: "Estés donde estés pide salmorejo cordobés", un manjar del que existen cientos de versiones y que también se sirve como salsa de acompañamiento a diversos platos. Varias localidades sevillanas como Herrera y Osuna tienen como comida típica una variante del salmorejo, en el que introducen el pescado o el pimiento. Ahora cabe esperar que las localidades de la costa tampoco se quejen de la inclusión en esa lista del pescaíto frito (diminutivo no aceptado por los ortodoxos de la jerga hispalense).